Edwin Flores

La Juventud dominicana y su relevo en la política

Edwin A. Torres Frias, M.A.

Abogado y docente universitario

En estos días vuelve a traste el relevo en la política dominicana, elemento esencial y constante en cada área de las sociedades y en los Estados basados en la democracia, que bien o mal permite a sus ciudadanos vivir de las esperanzas y deseos de mayor superación, elevación de estatus social y por qué no, un cambio y estilo de vida acorde a nuestra era contemporánea, pero qué ha pasado con parte de nuestra generación que se ha quedado rezagada y no forma parte de los partidos políticos de forma activa con sus escasos excepciones?, quienes están descollando y ocupando cargos relevantes dentro del gobierno y o partidos de oposición?, fijaos bien, que son apadrinados por alguien de su organización que le garantice su espacio, o son hijos de los mismos, que en ocasión no llevan consigo el interés general , situación desgraciadamente no conectan con la base social dominicana, ni los intereses generales, ciudadanos golpeados por las carencias de oportunidades y con un deslumbrado camino durante el trayecto de su vida, que hace que en ocasiones abandonen nuestra hermosa isla, que tan responsables han sido los partidos del sistema de este flagelo?. Los fondos recibidos por nuestra Junta Central Electoral tienen como principio sustentar nuestra democracia a través de los partidos políticos, pero estas instituciones desvían sus fondos según la apetencias de quien o quienes lo dirigen y se olvidan que para que exista fortaleza desde los partidos se deben educar en pro de la democracia y el sistema, basado en un idealismo que alcance el bienestar común, de esta forma y manera se pueda cosechar una generación arraigada y con propuestas cargadas de realidades que puedan ser llevadas en futuras gestiones de gobiernos a nivel nacional, de gestiones municipales. Joven dominicano aún cuando no tenga arraigos o abolengos sociales, esfuérzate y lucha frente a las adversidades del que tiene el yugo, se guerrero, tu batalla es constante, pero nada humano es imposible alcanzar.