Miembros del CDP y SNTP expresan descontento y piden renuncias ante falta de apoyo de sus gremios

Santo Domingo, RD – Crece el descontento entre los miembros del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP) y el Sindicato de Trabajadores de la Prensa (SNTP), quienes señalan a ambos gremios de haber abandonado la defensa de sus afiliados y de favorecer, en cambio, a personas externas que critican y difaman a los propios periodistas colegiados. Esta situación ha generado reflexiones sobre la utilidad de ser miembro del CDP y el valor real de pertenecer a una institución que, según sus críticos, ha perdido su propósito original.

Diversos periodistas y trabajadores de la prensa han manifestado que estos gremios parecen dedicarse más a promover a personas externas que insultan a sus miembros, mientras que los afiliados sienten que no reciben apoyo ni protección. “¿De qué sirve ser miembro del Colegio de Periodistas?” es una pregunta que surge cada vez con mayor frecuencia entre los afiliados, quienes también se plantean si vale la pena continuar en la institución.

Una de las principales críticas se dirige hacia el secretario general del CDP, Juan Carlos Bisonó, quien, según los denunciantes, ha mostrado cercanía con personas que denigran y descalifican a miembros del gremio, y se le ha visto incluso al lado de aquellos que lanzan agravios hacia sus propios colegas. Las críticas se intensificaron luego de que Bisonó apareciera en el Palacio de Justicia, acompañado de personas que, de acuerdo con los denunciantes, no forman parte del CDP y han emitido constantes ataques hacia los miembros del Colegio.

Esta situación ha llevado a algunos miembros del CDP a cuestionarse sobre su permanencia en la institución y a considerar la posibilidad de renunciar. Algunos han propuesto “romper el carnet y depositarlo junto a una carta de renuncia” en las oficinas del CDP, en señal de protesta.

Los afiliados exigen que el CDP y el SNTP retomen su rol de protección y defensa de los periodistas y trabajadores de la prensa, y que muestren solidaridad con sus miembros, especialmente en un entorno de creciente hostilidad. La situación actual es, según los críticos, “penosa y lamentable” para la entidad, y se espera que estas preocupaciones generen cambios o respuestas concretas por parte de la directiva.