Presidente promete realizar los ajustes fiscales necesarios
El presidente Luis Abinader especificó este lunes que el Gobierno no tiene otra propuesta de reforma fiscal y que hará los ajustes presupuestarios que amerita el momento que vive la República Dominicana.
«Nosotros no tenemos otra propuesta de reforma fiscal, lo que hemos anunciado es hacer los ajustes necesarios, nos ha tocado gobernar en un momento difícil», resaltó el primer mandatario.
Abinader ofreció estas declaraciones al ser cuestionado sobre el estatus actual del proyecto de Ley de Modernización Fiscal, tras el anuncio de su retiro del Congreso el pasado sábado en una alocución nacional.
«Vamos a tener que volver al presupuesto que tenemos, el pueblo habló, haremos los ajustes de lugar, tenemos que terminar las obras inconclusas, pero tenemos que ser cuidadosos con mantener un nivel de deuda controlada», agregó.
Aseguró que el país seguirá creciendo, que habrá grandes inversiones y que se mantendrán los niveles de empleos.
Durante la edición de este lunes de La Semanal con La Prensa, el presidente estuvo acompañado de Biviana Rivero, directora ejecutiva de ProDominicana, donde abordaron el tema de las exportaciones nacionales en el último cuatrienio, valorando que se ha alcanzado 45,804 millones de pesos en exportaciones.
De igual forma, destacó que los principales rublos que el país exporta son oro en bruto, instrumentos médicos, cigarros y puros, interruptores eléctricos, artículos de joyería, cacao y camisetas de algodón.
Retiro del Congreso
En LA Semanal del pasado 7 de octubre el Gobierno presentó su propuesta de reforma, a la que llamó «Ley de Modernización Fiscal». El presidente Abinader junto al ministro de Hacienda, Jochi Vicente, la explicaron en detalle.
Al día siguiente, el martes 8, Vicente depositó el proyecto en el Senado de la República.
La propuesta planteaba la expansión de los productos gravados con el Impuesto sobre Transferencias de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS), un aumento del Impuesto al Patrimonio Inmobiliario (IPI), el marbete, los servicios profesionales, entre otros. También eliminaba exenciones a sectores clave como el turismo, zonas francas y el cine.
El proyecto generó el rechazo de la mayoría de los sectores y de la población en general, provocando cacerolazos nocturnos de la clase media, la que sería la más perjudicada.
El rechazó también se evidenció en las vistas públicas celebradas por la Cámara de Diputados la pasada semana, en donde la mayoría de los más de 100 participantes, se manifestó en contra del proyecto.
Ante este escenario, la noche del sábado, el presidente anunció que retiraría el proyecto del Congreso.