Hace énfasis en que la renovación no llegará al PLD y que el partido se viene dividiendo desde el 2019
El exmiembro del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Carlos Amarante Baret, detalló este domingo las razones por las que argumenta que el presidente de dicha organización, Danilo Medina, tomó la decisión de expulsarlo de por vida y de manera deshonrosa de dicho partido.
En un video de siete minutos que fue publicado en las redes sociales expresó que fue tornándose un «militante incómodo«.
«Me fui tornando un militante incómodo porque nunca acepté ni voy a aceptar que, porque un presidente me nombra en un puesto público, debo alquilar mi mente, mi alma, mi conciencia y mi vida, como si fuera un siervo de la gleba; eso jamás. Y eso siempre lo supo el expresidente Danilo Medina«, declaró Amarante Baret.
El Tribunal Nacional de Disciplina y Ética del PLD expulsó de por vida y de manera deshonrosa a Amarante Baret, quien era miembro del Comité Central y del Comité Político del partido, por «atentar contra la unidad» de la organización.
Según un documento emitido a finales de septiembre, estaba instando a otros miembros del PLD a renunciar y unirse a él en la creación de una nueva organización política. Esta conducta fue considerada como «faltas graves y muy graves».
La decisión se dio a conocer en el marco de la Plenaria General Aprobatoria del X Congreso Ordinario Reinaldo Pared Pérez.
Sin embargo, Amarante Baret indicó en su video que Medina no le perdona que haya develado su plan (de Danilo) de ser aclamado y perpetuarse como el presidente del PLD. «Cuando lo emplazamos públicamente a que cumpliera su palabra empeñada de retirarse de la presidencia de la organización», puntualizó.
«Segundo: Danilo no me perdona que impulsara la formación de un frente opositor que fue aprobado por el Comité Político, a pesar de él no estar de acuerdo, y al cual se opuso y se sigue oponiendo sistemáticamente», añadió.
Señaló que Medina no lo perdona por hacer pública la evaluación de la base del XI Congreso José Joaquín Bidó Medina, «totalmente negativa para la dirección del partido, al igual que la que acaba de hacerse en el presente X Congreso y que ya fue engavetada».
La última de las razones que pormenorizó es que todavía el expresidente no perdona que haya denunciado que «aún sigue siendo un jefe grupal, a pesar de ser ellíder de la organización», y no renuncia a esa vieja práctica. «Sé por qué lo digo, porque viví en el monstruo y le conozco las entrañas».