La delegación de nueve eurodiputados, diputados y senadores del partido conservador español PP a los que se impidió la entrada en Venezuela aterrizaron este sábado en el aeropuerto de Madrid y aseguraron que «la limpieza de las elecciones venezolanas no está garantizada».
«Hemos observado una dictadura que se pudre y se cae y tememos que mañana es capaz de las mayores atrocidades para intentar impedir la victoria imparable de la oposición democrática», manifestó el eurodiputado Esteban González Pons, responsable de asuntos internacionales del Partido Popular, tras el vuelo de ida y vuelta a Venezuela.
El dirigente popular explicó que viajaban tres expediciones diferentes de los populares -una del Parlamento europeo, otra del Congreso y otra del Senado- en respuesta a «invitaciones formales» de la oposición venezolana para «acompañarles» en las elecciones del domingo.
No iban como «observadores internacionales», que, según la legislación venezolana, exige ser reconocido como autoridad electoral, recalcó González Pons, quien indicó que habían informado de su viaje tanto al Ministerio Exteriores español como al embajador de España en Caracas y a los embajadores de Venezuela en Bruselas y en Madrid.
Los parlamentarios populares recibieron negativas para acudir como observadores internacionales, que no como acompañantes electorales, algo que, por otro lado, según el dirigente del PP, habría resultado «absurdo» porque en unas elecciones no puedes negar «a los amigos que vayan a acompañar a aquellos que quieren que ganen».
En el aeropuerto de Caracas fueron atendidos por el cónsul general de España, pero no por el embajador, que «hizo mal no acudiendo a amparar a nueve compatriotas suyos en una decisión difícil y sometidos a la arbitrariedad de un poder dictatorial», según el popular.
González Pons tachó de «lamentable» la actuación del Gobierno español por «compartir el discurso de los chavistas» ante su expulsión.
«El Gobierno español debería rectificar inmediatamente y, en lugar de avalar los argumentos de Maduro debería respaldar a sus compatriotas», señaló, tras avanzar que en el Parlamento Europeo exigirán reciprocidad de trato para los dirigentes venezolanos.
Según apuntaron anoche fuentes del Ministerio de Exteriores español, Venezuela no autorizó la visita de una delegación del Senado como misión de observación y solo el PP decidió realizar el viaje.
González Pons tachó además de «indecente e inaceptable» la actitud del expresidente español Rodríguez Zapatero, cuya presencia como observador internacional reclamaron sin éxito en el aeropuerto.
«Zapatero algún día va a tener que explicar, o si no el nuevo Gobierno venezolano investigar, cuáles son sus vínculos con esa dictadura tan criminal. Y advierto, si este fin de semana el Gobierno de Maduro hace algo que conduce a lo que nadie quiere, Zapatero será directamente corresponsable», afirmó González Pons.
Según explicó el eurodiputado conservador, las autoridades venezolanas alegaron para su expulsión que los eurodiputados habían votado a favor de sanciones a los dirigentes chavistas.
González Pons, convencido de que el domingo la victoria de la oposición será «incontrovertible, indiscutible e histórica», apuntó que si el «sufrimiento» que han pasado ha servido para ayudar aunque sea «una miga», «bien está».
En la misma línea, el portavoz de los populares en el Congreso español Miguel Tellado, mostró la carta de invitación que recibieron de los líderes opositores Edmundo González y María Corina Machado para acompañarles en este fin de semana en Caracas.
Desde el aeropuerto madrileño, donde fueron recibidos por venezolanos que esperaban la llegada del vuelo, los populares trasladaron su apoyo a la oposición de aquel país para acabar con 25 años de «un régimen autoritario, autocrático que se ha convertido en una auténtica tiranía» y han exigido respeto para el resultado de las urnas.