A propósito de la celebración de las elecciones municipales del próximo domingo
18 de febrero, Ricardo Fondeur indicó que se confía en que las elecciones
legislativas y nacionales de este año 2024, cumplirán los principios rectores de
la organización de los procesos electorales, establecidos en la Ley Orgánica del
Régimen Electoral, 20-23.
Se espera certeza, transparencia e integridad. Igualmente, el cumplimiento
ineludible de equidad, inclusión y pluralismo. Esa es la única ruta segura para
elegir con transparencia, el Poder Municipal, el Poder Legislativo y el Poder
Ejecutivo de República Dominicana.
El proceso de Escrutinio, Digitalización, Escaneo y Transmisión de datos,
conocido por las siglas EDET que asegura eficiencia, eficacia y efectividad de
este proceso, es fundamental.
Para tales fines, el reto es importante dado que por la pandemia COVID 19 y la
crisis de las elecciones municipales del año 2020, la participación electoral en
votos emitidos se redujeron el 14.3%, llegando a 55.3% en los pasados comicios,
se espera que en estas elecciones el valor de participación electoral aumente.
De acuerdo al monitoreo del Plan Estratégico de Santiago y de su entidad socia,
Participación Ciudadana, en el año 2000 votó el 69.8%; en el 2004, el 67.6%; en
2008, 66.3. Asimismo, en el 2012, el 64.1% y en el año 2016, votó el 69.6%.
En este 2024 esperamos que se recupere la voluntad y deber ciudadano de
asistir a las elecciones el domingo 18 de febrero. Cumplir con el compromiso
constitucional y elevar significativamente, la cantidad de votos emitidos. Luego
de la mejoría institucional en la Junta Central Electoral (JCE), estamos
optimistas.
La nación se dotó de jueces titulares de elevada y significativa profesionalidad y
confianza. Los diagnósticos de gobernabilidad del Plan Estratégico de Santiago
al año 2030, indican los grandes logros y retos de la democracia dominicana.
Finalmente, valoramos la interacción entre representantes de una sociedad, para
llegar a convenios y acuerdos que contribuyan al bien común. Alianzas que nos
aporten una representatividad política equilibrada, legítima y auténtica.