Con la llegada de Bosch al País en 1970, de su exilio en España ocurrido en 1966, inicia lo que se llamó la desgarrapatizaciòn del buey blanco, el cual, según su tesis, el PRD estaba infiltrado por grupos de izquierda. La cabeza de la purga le correspondió, al segundo dirigente en importancia del PRD de la época después de Peña Gómez, me refiero a Rafa Gamundy Cordero.
Como una coincidencia histórica, con la llegada de Danilo de Miami, no por exilio sino por enfermedad, se inicia la desleonización del PLD. En este caso la cabeza visible es el influyente dirigente del CP y la OTAN, Francisco Javier García.
Carlos Mark decía que la historia se repite dos veces, la primera como una tragedia y la segunda como una farsa, aunque en este caso creo que se rompe el precedente. El tiempo se encargará de poner en su lugar, lo apropiada o no de esta decisión.
La forma abrupta y no política del rompimiento de los dos lideres del PLD, que implicó la salida de esa organización del poder, sin lugar a dudas creó heridas que quizás jamás lleguen a cicatrizar. Por eso aquellos que apostaban a una alianza para el 2024, simplemente estaban siendo subjetivos y hasta cierto punto ilusos.
Leonel sacó un 9% con aliados en las elecciones pasadas y en las últimas encuestas marca por encima del 30%, situación lograda por la migración de peledeistas a FP y su candidatura. Esto indica que el leonelismo ha ido succionando al PLD.
En su discurso de declaración de guerra a la FP y el inicio de la desleonización del PLD, Danilo Medina en una asamblea de dirigentes estableció, que un 35% de peledeistas se inclinan por Leonel cuando lo encuestan. Alegando que eso no es honesto y que implica el querer llevar una doble agenda, lo cual, según el vocero de Abel, Fernando Fernández, es actuar como una quinta columna.
La acusación de actuar como quinta columna a los simpatizantes de Leonel dentro del PLD, es un símil histórico, a lo ocurrido en la guerra civil española, donde los franquistas marchaban hacia la capital con cuatro columnas al mando del general Emilio Mola. Una quinta columna ya estaba en Madrid infiltrada entre los Republicanos y actuando a favor de los golpistas.
Quinta columna es un término muy fuerte, ya que indica deslealtad y traición de quienes, desde una organización, trababan para el bando contrario, proporcionándoles informaciones y socavando su unidad interna.
Esto nos indica que todo lo que huela a Leonel dentro del PLD, serán considerados como traidores infiltrados, por lo que o cambian de actitud y se suman al PLD y su candidato, o simplemente abandonan esa organización y pasan abiertamente a trabajar para la FP y Leonel Fernández.
La suerte está echada ( alea iacta est?), como dijo Julio Cesar al cruzar el Rubicón desde las Galias para ocupar a Roma y obligar a Pompeyo a abandonar la ciudad. Muchos seguidores de Pompeyo se quedaron en Roma y se sumaron a Julio César, pero otros siguieron a su líder para ser derrotados en la batalla de Farsalia en Grecia.
En esta situación sólo nos queda preguntarnos, si aquellos que desde el PLD ya pactaron con Leonel, abandonarán su organización para seguir su nuevo líder o decidirán permanecer al lado de su entidad para librar las batallas que se avecinan.
Si hacen lo primero, quizás no tengan la suerte de Bruto, que siguió a Pompeyo y al ser derrotados en Farsalia, fue perdonado por Cesar, nombrándolo gobernador de las Galias. Aunque la respuesta a tan noble acción del líder Romano, luego fue de conspirar con el Senado, para ocasionarle la muerte a cuchilladas a su padre adoptivo y protector, que sólo alcanzó a decir según historiadores: ” Et, tu Brute?”. “Tú también Bruto”.