Comerciantes respaldan propuesta del Conep sobre aumento salarial voluntario

Sindicalistas consideran necesario debatir la iniciativa del sector empresarial en el Comité Nacional de Salarios

Empresarios y pequeños comerciantes valoran como positiva la sugerencia del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep) para que se reajuste el salario de los empleados  de manera voluntaria para aminorar la presión inflacionaria. Sin embargo, algunos consideran que el tema primero debe ser debatido por el Comité Nacional de Salarios (CNS).

El lunes, el Conep exhortó al sector empleador del país realizar un “ajuste voluntario de salarios”, tomando en cuenta los niveles de inflación experimentados en el país durante el último año, sugerencia que ha sido acogida por empleadores.

Reajustar los sueldos “es una buena medida, ya que los costos (refiriéndose a la canasta familiar) están subiendo y los sueldos se están disminuyendo, lo que hace que los trabajadores perciban que el dinero no les alcanza”, expresó a Diario Libre Carlos Luna, administrador de la tienda La Bomba, ubicada en la populosa avenida Duarte.

En la concurrida tienda de la Duarte trabajan más de 50 personas y el sueldo mínimo que se devenga en el lugar es de aproximadamente 21,000 pesos, conforme al último reajuste salarial que se realizó de manera escalonada, con una primera proporción del aumento en julio de 2021 y la segunda realizada en enero de este año.

Luna considera que ese aumento al que se llegó en consenso por los integrantes del CNS no tiene el mismo valor por la inflación. “Es bueno que los sueldos vayan acorde con lo que va pasando en la economía para que los empleados disfruten de lo que devengan como sueldo”, dijo.

Radhamés Mejía, gerente financiero de Encajes La Rosario, consideró oportuno evaluar los salarios, pero explicó que se debería hacer en conjunto entre el sector empresarial y el gubernamental, pues entiende que cualquier aumento realizado de manera independiente no resuelve la situación en general.

“¡Sería lo ideal!”, exclamó. Pero la propuesta de solo subir el salario sería insuficiente, ya que hay otros aspectos que se deben considerar para que la población enfrente la inflación, dijo Mejía.

Sostuvo que, si el Gobierno no toma medidas para contrarrestar la inflación, el aumento no valdría la pena y el porcentaje será absorbido nuevamente.

En tanto que pequeños comerciantes consultados durante un recorrido realizado ayer por la avenida Duarte expresaron su disposición en acatar la sugerencia y agregaron que subir el salario aumentaría el poder adquisitivo de la ciudadanía en beneficio de los propios comercios.

En el informe Coyuntura Laboral de América Latina y el Caribe, la Cepal indica que en 2021 los salarios reales promedio de Ecuador, República Dominicana, Bolivia y Perú registraron contracciones de más del 10 % respecto de 2019.

Para atenuar la presión inflacionaria, el Conep precisó que su propuesta es el resultado de “amplias consultas realizadas por el gremio empresarial que agrupa a las principales asociaciones y empresas del sector privado dominicano y los sectores productivos del país”.

Mesa del diálogo

Tras el planteamiento del consejo de la empresa privada, el secretario general del Consejo Nacional de la Unidad Sindical, Rafael (Pepe) Abreu, saludó la iniciativa y dijo que solicitará al Ministerio de Trabajo la convocatoria del CNS para socializar el tema propuesto por la cúpula empresarial.

Acogió como bueno y valido convocar al comité para discutir las condiciones porque “las propias leyes señalan que en tiempos de graves restricciones que merman los ingresos de los trabajadores hay que tomar medidas que contribuyan a mejorar sus condiciones de vida”, ponderó.

Mientras que la Organización Nacional de Empresas Comerciales (ONEC), principal representante del comercio formal en el país, respaldó la iniciativa del Conep en reajustar los salarios de manera voluntaria, para lo que no es necesario llevar al diálogo tripartito el tema.

Mario Lama, presidente de la ONEC, expresó que “la forma en la que fue planteada la sugerencia es para que cada empresa realice un ajuste de manera independiente y voluntaria”.

Economista no cree posible efecto de espiral inflacionaria con el alza

El economista José Luis de Ramón, quien ha sido miembro del Consejo de Directores de empresas dominicanas, considera que, de producirse el alza salarial voluntaria que propone el Conep, no sería en lo inmediato. Estima que las empresarias grandes la harían para final del año y en menor medida las pequeñas. “Y quizás durante el año que viene haya que juntarse el Comité de Salarios para establecer aumentos de los mínimos”, dijo.

De Ramón proyecta que la inflación va a ir cediendo y considera que a la mayoría de las empresas no les está yendo mal a nivel financiero “porque el país está creciendo”. “O sea que no habría ninguna razón para que hacia final del año no se pueda pensar en aumentos de salarios que recuperen, si no totalmente, por lo menos parcialmente la erosión en el salario real.

En marzo pasado, De Ramón analizó que desde diciembre de 2019 el salario nominal (el que recibe el trabajador como pago) aumentó 5.5 % y el real (el poder adquisitivo de ese pago) cayó 7.8 %. Calculó que, en 2020, el salario promedio nominal perdió 4.2 % y el real 9.5 %. En 2021, con aumento de sueldos producidos, el salario promedio nominal subió 10.1 %, pero la inflación dejó el salario real igual a 92.1 % del salario real de diciembre de 2019.

«Desde el último aumento de salarios al día de hoy, debe de haber aumentado la canasta familiar entre un 15 y un 20 por ciento, entonces básicamente ese sería el monto que habría que recuperar. Entiendo que algo más de la mitad se podría hacer hacia final del año y el resto el año que viene”, analizó.

Al preguntarle sobre el efecto económico que pueden tener los aumentos salariales en un contexto inflacionario, explicó que todo aumento de costos empuja los precios hacia arriba, sea el costo del trabajo o de la materia prima. “Eso es inevitable”, dijo, “pero no necesariamente crea lo que se llama una espiral inflacionaria, que es que los costos se retroalimentan en inflación”.

La espiral inflacionaria es una subida de precios que se produce cuando hay un alza de salarios, que empuja un incremento de los costos de producción que, a su vez, fomenta un alza de los costos de las materias primas que provoca una nueva subida de los precios.

El economista no cree posible que, en el actual contexto, recuperar el salario real de las personas en un plazo de 12 meses genere una espiral inflacionaria, “aunque siempre aumenta los precios”.