Luis Estrellla
En este mes de junio del 2022, si la memoria no me falla, cumplo 50 años de militancia ininterrumpida en las lides políticas. 10 años en la izquierda revolucionaria, 13 años en el PRD y 27 en el PLD. Cualquiera quisiera durar ese tiempo de vida y en mi caso es un privilegio haberlo cumplido sólo en el mundo político.
En verdad no tuve una adolescencia como la mayoría de jóvenes, sino que desde temprano edad opté por integrarme a una organización de izquierda, el Movimiento Revolucionario Nueva República-MORENURE-. Esto me hizo desarrollar un esquema de vida diferente, porque en vez de los desafueros normales de la adolescencia, me dedique a leer la teoría Marxista- Leninista y a vivir con todas las limitaciones y riesgos que implicaba la lucha en contra del sistema represivo de esa época.
Esos 10 años fueron de gran enseñanza, la persecución y los años de clandestinidad, me permitieron templar mi carácter, forjar un espíritu indoblegable y a tener la firmeza de perseguir mis sueños con pasión y perseverancia. Aprendí a conocer la naturaleza humana, con toda su bondad, aunque también con su lado oscuro.
Los años en el PRD fueron de gran turbulencia, un partido con gran vocación democrática, pero con una esencia anarquista y de profusa indisciplina.
En el PLD, las cosas fueron más tranquilas, al ser una organización más disciplinada que el PRD, por lo que con sus altas y bajas, siempre logramos sortear positivamente la situación.
Cumplir 50 años de labor en cualquier área es mucho, pero más en la política, por los intereses que eso envuelve y lo difícil de mantener en alto los valores, el decoro, la dignidad y los principios.
De mi parte puedo decir que me siento satisfecho por haber conocido en este período de mi vida, personas de inmensos valores morales, llenas de lealtad y gratitud, aunque sean los menos, pero son los suficientes para llenar de agradecimiento mi corazón.
Transcurrido 50 años de labor política ininterrumpida, considero que es tiempo de cerrar ese ciclo de mi vida, por haber comprendido, que debo vivir los años que me quedan en completa y absoluta libertad.
Dedicando tiempo a mi familia, amigos y al disfrute de las cosas que me generan pasión, entre ellas leer y escribir. En los próximos días publicaré la obra «Fuente de Sabiduría «, ese será mi propósito, un libro anual, el año pasado publique: «Vivir en Libertad».
Existe el criterio que quien participa en política lo hará para toda la vida, lo cual en verdad ocurre con la mayoría de personas y es algo normal, porque la sabiduría para dirigir y gobernar, se adquiere con la experiencia. Aunque en mi caso, seré la excepción, ya que he tomado la firme decisión de retirarme de la vida política- partidaria.
Esto no responde a ninguna causa en especial, sino sencillamente, porque a través de un proceso reflexivo hacia lo más profundo de mi interior (consciencia), pude llegar a la conclusión, de que, para dedicar a la vida política, 50 AÑOS YA SON SUFICIENTES.