La Junta Central Electoral (JCE) ha tratado de contener el proselitismo anticipado, pero no es fácil. La cultura política está por encima de deseos, intenciones y hasta de las normativas legales. Pero algo se ha logrado, aunque sea poco, ya que los políticos son más discretos en sus actividades. También han tenido que cambiar la terminología y los que antes se denominaban precandidatos presidenciales, por ejemplo, ahora son simplemente “aspirantes”, mientras que las primarias ahora son “consultas”. Pero hay un escenario en donde el proselitismo es desenfrenado, sin límites, y es en las redes sociales. El que entra ahí, especialmente en Twitter, cree que las elecciones están cerca, cuando faltan dos años. Y no solo se percibe una campaña adelantada, sino un triunfalismo anticipado, y no de un solo sector político.
Los triunfalistas
Ellos se manifiestan en las redes, pero también con declaraciones públicas escritas o en comparecencias y entrevistas en los medios tradicionales. Son los triunfalistas. Están en todas partes, es decir, en los tres principales partidos. Pero la mayor dosis de triunfalismo, al menos en este momento, se observa, paradójicamente, en Fuerza del Pueblo, el partido más joven del sistema, el cual, en su debut, obtuvo un porcentaje de votos que no llegó a dos dígitos. Los de la FP antes hablaban de clasificar y ganar en una segunda vuelta, pero ahora piensan en primera vuelta. Para muchos de ellos, solo hay que esperar el día de las elecciones. Ellos cuentan con que Leonel Fernández será Presidente por cuarta vez.