Haití dispara alarmas en la región por olas migratorias y violencia

Nathanael Concepción, Edwin Paraison y Manolo Pichardo.
Colombia se sumó al llamado de República Dominicana, Panamá y Costa Rica para buscar un solución conjunta
Ante la creciente violencia y ola de secuestros en Haití, así como las caravanas de migrantes haitianos para distintos destinos de la región y Estados Unidos, los países de América Latina y Estados Unidos han activado las alarmas de la amenaza que representa la crisis haitiana para la estabilidad de toda la región.

Es en ese enfoque que analistas de la crisis haitiana ven oportuna la propuesta de tres países, República Dominicana, Panamá y Costa Rica, de desarmar la población del vecino país y llamar a la comunidad internacional para abordar el problema de manera conjunta. Ayer, el presidente de Colombia, Iván Duque, se unió al pedido de los presidentes de esos países de atender la crisis haitiana y pidió que se haga un censo para determinar la cantidad de haitianos que han emigrado a países americanos.

El especialista en derecho internacional Nathanael Concepción advirtió que al profundizarse la condición de estado fallido que vive Haití por el aumento de la violencia y la “industria” del secuestro se acerca cada vez a convertirse en la Somalia de la región.

“Lo que pasó en Somalia es que la industria del secuestro puso en riesgo la seguridad del hemisferio, incluso del comercio internacional, y por eso hay que evitar que la violencia en Haití llegue al punto de que la seguridad del hemisferio esté más comprometida y las olas migratorias y el secuestro de los misioneros norteamericanos y Canadá deben alertar en ese sentido”, advirtió.

Dijo que el momento es propicio para convocar una cumbre amplia y que es correcta la posición del presidente Luis Abinader de empezar a propiciar ese espacio con la declaración de otros dos países sobre la necesaria intervención de la comunidad internacional en Haití. “Hace bien el presidente Abinader en leer el momento político y buscar la forma de dinamizar el esfuerzo de la comunidad internacional”, comentó.

Concepción enfatizó que lo que debe quedar claro es que como dijo el presidente Abinader no hay ni habrá una solución dominicana al problema de haitiano porque se trata de una crisis que abarca toda la región y no solo de un conflicto entre el país y Haití.

El exembador haitiano, Edwin Paraison dijo que Haití calificó muy oportuna la iniciativa de República Dominicana, Panamá y Costa Rica.

“Es muy oportuna ya que demuestra preocupación y solidaridad con el pueblo haitiano, toda vez para lograr su cometido se debe asumir que algunos actores de la comunidad internacional son parte del problema”, advirtió.

Dijo que es partidario de una cumbre internacional para tratar el problema. “Hemos planteado en la Fundación Zile la necesidad de organizar una cumbre sobre la crisis haitiana para dar la palabra ante el mundo a los representantes de las fuerzas vivas de la nación con el doble objetivo de dar pie a un nuevo modelo de cooperación con Haití que incluya los importantes tópicos sugeridos en la declaración conjunta de Republica Dominicana, Costa Rica y Panamá; al mismo tiempo reconstruir los lazos con algunos actores de la comunidad internacional que hoy día no tienen la mejor imagen en el pueblo haitiano”, expresó.

Explicó que no está de acuerdo con lo planteado por los países que piden el desarme de la población haitiana. “En este aspecto tenemos un punto de vista diferente del de los tres presidentes porque no se trata en el fondo de desarmar la población. Esta no está armada si lo fuera tuviéramos ya una guerra civil en el país. La población es un rehén de los grupos armados que tienen conexiones en el oficialismo o están al servicio de diversos líderes políticos”, subrayó.

Manolo Pichardo, titular de la secretaría de asuntos internacionales de la Fuerza del Pueblo (FP), la crisis haitiana se está convirtiendo en un problema para la seguridad de los Estados Unidos y la región. “Porque ya la cuestión migratoria no solo afecta a la República Dominicana sino que se han creado corredores que atraviesan todo el continente, desde el extremo sur hasta Canadá. Este cambio ha puesto en alerta a otros países que están siendo afectados por la crisis migratoria”, sostuvo.

Agregó que el mismo pronunciamiento de los presidentes de Panamá, República Dominicana y Costa Rica es producto de ello. “Costa Rica y Panamá que son parte del corredor migratorio, igual que Colombia y otros países que veían con indiferencia este asunto comienzan a manifestar preocupación”, observó.

Sostuvo que el llamado de los presidentes de esos países es positivo pero advirtió que hay que pasar de las palabras a los hechos. “Etas son cuestiones que se plantean una y otra vez y la comunidad internacional se mantiene indiferente”, dijo. Sin embargo, observó que aunque la iniciativa en principio es positiva, la alianza de esos países debilita la integración regional que es la que está llamada a jugar ese papel ante el tema haitiano.

Pacheco advierte sobre secuestro a dominicanos

El presidente de la cámara de Diputados, Alfredo Pacheco, mostró preocupación por la situación que está ocurriendo en el vecino Haití, por la ola de secuestros que incluye a dominicanos Explicó que entre los secuestrados figuran varios camioneros que pertenecen a su circunscripción, específicamente del kilómetro 13 de la autopista Duarte. Dijo que es oportuno y atinado el llamado del presidente Luís Abinader y de los demás mandatario de Panamá y Costa Rica, con relación a las crisis política que vive Haití. Indicó que es indudable que la comunidad internacional ha sido irresponsable con el tema haitiano, que han querido dejarle ese problema a la República Dominicana. “Ojalá que eso sirva para que entendamos que en Haití no solo son esas 17 que están secuestradas, sino que hay mucha gente, cientos de personas que están secuestradas, sobre todo una gran cantidad de dominicanos”, agregó Pacheco.