Condenan a 20 años de cárcel a Gabriel Villanueva por homicidio de Andreea Celea

 Debe pagar una indemnización de RD$5 millones. Quedó demostrado que Andreea Celea no se suicidó

Gabriel Villanueva fue encontrado culpable ayer de haber cometido homicidio al lanzar a su novia Andreea Celea del octavo piso de un hotel en la capital; en consecuencia, el tribunal lo condenó a una pena de 20 años de prisión, además del pago de una indemnización de RD$5 millones por los daños y perjuicios causados a la familia de la víctima.

Villanueva escuchó la sentencia con la frente en alto, no se le vio llorar o tener ninguna reacción, mientras los jueces Claribel Nivar, Yisell Soto y Deiby Peguero motivaban la sentencia que lo mantendrá, por dos décadas, en el Centro de Corrección y Rehabilitación de San Pedro de Macorís.

Mirando al procesado, los magistrados del Segundo Tribunal Colegiado, del Distrito Nacional, expresaron que: “Ciertamente, estamos frente a un ciudadano con un comportamiento violento y desordenado”. Argumentaron que llegaron a esa conclusión tras analizar las conversaciones telefónicas entre este condenado y Celea, además de los testimonios sobre episodios violentos ofrecidos en el tribunal.

Al analizar la “fluidez de la comunicación” de los mensajes entre Villanueva y Celea, observaron “imágenes de droga, sexo fuerte y violento, y conversaciones violentas entre los involucrados”.

El tribunal estableció que hubo un círculo de violencia que tuvo un nexo causal con la muerte de Celea. Para sostener esta afirmación, los jueces se basaron en las declaraciones de varios testigos, presentados en el tribunal; la señora Damiana Morel; Juan Liriano; y Cezara Voicila.

El tribunal valoró el testimonio de Damiana Morel, quien administraba el apartamento donde residía Villanueva, y declaró que “en el residencial existían quejas que cuando este ciudadano estaba en el apartamento, se escuchaban ruidos y lanzamientos de cosas”.

Morel expresó en estrado que, en una ocasión, fue a la puerta de Villanueva, y le dijo “Abre la puerta, cobarde”, tras ser avisada de que este le estaba pegando a Celea.

Luego de esto, estableció el tribunal, Gabriel Villanueva intentó agredir a Damiana Morel, pero fue detenido por el conserje Juan Liriano. Este testigo lo declaró en estrado, pero alegó, además, haber visto que Villanueva tenía una conducta violenta.

El homicidio

Sobre las evidencias para el homicidio, el tribunal explicó que la caída del cuerpo indica que se trató de “un movimiento parabólico” y, por el lugar del impacto, se pudo establecer que hubo “una fuerza externa”, debido a que el cuerpo cayó en un lugar distante, y la única persona que estaba con Andreea, en ese hotel, era Villanueva.

Queda dolor de madre

Conmocionada, la señora Anka Voicila manifestó que, para una madre, ninguna condena en prisión es suficiente, pero le agradeció a Dios, “primero, porque aún sean solo 20 años, se hizo posible. Y lo más importante es que se demostró que Andreea no era lo que ellos (defensa de Villanueva) presentaban, y que Andreea no se suicidó”.

Expresó que fueron dos años y medio “de mucho dolor, el cual no terminará, pero, por lo menos, voy a poder dar un cierre a esto”.

Condena ejemplar

Las fiscales Magalis Sánchez y María Silvestre, quienes pelearon el caso, calificaron la decisión como “una condena ejemplar”, y como “una muestra que el Ministerio Público perseguirá a los que matan a las mujeres”. A Celea la mataron el 1 septiembre del 2018.

El imputado recurrirá

La abogada Sonia Marlene Guerrero, defensa de Villanueva, advirtió que apelarán la sentencia por entender que es “anulable” por tener “contradicciones”. Dijo que no le sorprende la condena. “Sabíamos que podía pasar algo así. Lo voy a decir, sin ningún miedo, fue por la presión mediática. Lamentablemente, tenemos un sistema de justicia en el que se están llevando juicios paralelos en las redes. Nosotros vamos a hacer un uso efectivo de la norma”, expresó.

“Lo más importante es que se demostró que Andreea no era lo que ellos (defensa de Villanueva) presentaban, y que Andreea no se suicidó”