SANTO DOMINGO.-El viceministro de Planificación e Inversión Pública, del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, Pavel Isa Contreras, consideró que la política pública será clave para ayudar a la recuperación de la economía.
“La política pública tiene que ayudar mucho más en el segundo semestre (2021), inyectando inversión pública en proyectos de gran arrastre”, expresó el viceministro Isa Contreras, entrevistado en el programa “Esta Noche Mariasela”.
Isa Contreras, consideró que la construcción es el sector económico que tiene mayor capacidad de arrastre, especialmente pequeños proyectos, cuya composición de productos importados es menor y su encadenamiento local es mayor, ahí podría estar la clave.
A causa de la pandemia COVID-19 se ha registrado la caída más grande del producto en la economía del país y en América Latina. Al respecto, Isa Contreras precisó que en la República Dominicana se ha registrado la caída más profunda del producto desde 1965, que en ese año se registró debido a la guerra civil y la segunda ocupación militar estadounidense, la cifra fue de 12%.
“Estamos hablando de un retroceso en la producción y en el empleo realmente dramáticos, que se acrecentó debido a que en los últimas dos décadas no se ha impulsado el aparato productivo”, puntualizó el viceministro de Planificación e Inversión Pública.
Dijo que el efecto de la política monetaria a la cual recurrió la pasada administración fue limitado. “En realidad, no inyectó liquidez a las empresas, porque nadie iba a invertir cuando la demanda estaba en el suelo, la política monetaria para reactivar la economía fue muy inefectiva, lo que hizo fue alimentar a los bancos”, expresó Isa Contreras.
Recuperación de la economía y resiliencia de las exportaciones
El viceministro consideró que en este 2021 se tendrá una recuperación de la economía, pero a dos velocidades. La primera parte de este año la recuperación será más lenta, porque los efectos de la epidemia se seguirán sintiendo y probablemente en un sentido amplio no se verá la vacuna hasta el segundo trimestre del año, según han dicho las autoridades de salud.
En el caso de las exportaciones, Isa Contreras, consideró que han mostrado un nivel de resiliencia impresionante. “Creo que ha tenido que ver con el precio del oro, pero también con exportaciones nacionales, de dispositivos médicos y otros productos, es interesante este fenómeno”, argumentó.
El economista Isa Contreras reiteró que en el segundo semestre se verá una recuperación mucho más intensa de la economía.
“El año pasado fue tan malo que al empezarnos a recuperar este año los números van a verse muy grandes, pero eso no significa que hayamos llegado al nivel de actividad económica que vimos antes de la crisis”, recordó. Isa Contreras sostuvo que será una recuperación en dos velocidades, pero hay que ser cautos por el contexto internacional.
Programas sociales y pacto fiscal
Sobre los programas sociales, reiteró que el Gobierno los continuará, aunque no con el mismo tamaño del año pasado, porque parte del empleo se recuperó.
Se refirió a un estudio reciente publicado por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, «Covid-19 bajo la lupa – Efectos de la COVID-19 en la pobreza monetaria, la desigualdad y el mercado de trabajo», en el que se demostró que las transferencias a través de FASE y Quédate en Casa tenían un efecto muy importante en la mitigación de la pobreza.
Al referirse a un pacto fiscal, reiteró que el Estado dominicano tiene que dotarse de la legitimidad necesaria para cobrar impuestos y tiene que ser creíble para que la gente se sienta satisfecha de que los recursos públicos se gastan de manera transparente, enfrentando la corrupción, el clientelismo y la discrecionalidad.
Isa Contreras, manifestó que el primer principio tiene que ser transparencia y calidad del gasto público, el segundo, la suficiencia, y el tercero que sea con equidad horizontal y vertical.
Explicó que la equidad horizontal consiste en dar el tratamiento para gente similares y la vertical significa que los ricos paguen más que los pobres, lo que implica mover el sistema tributario hacia grabar renta y patrimonio.