Reynaldo Peguero, director del Plan Estratégico Santiago 2030
Reconocemos la iniciativa del presidente Luis Abinader y la vicepresidenta Raquel Peña de invertir dinero público en el Centro Histórico de Santiago. Valoramos que los recursos debieran ser orientados de forma participativa con los actores del Consejo de Desarrollo (CDES). Planificamos que con 100 millones de pesos del ministerio de Turismo, se arranca en firme, logrando una victoria rápida. Una acupuntura de impacto, que fortalece los logros alcanzados.
Nos ocupa ser coherentes con la Visión 2030 que gesta en tres años (2021-2023) y 68 millones de dólares del BID, recuperar urbana-ambientalmente el río Yaque con el aval y operación del actual gobierno nacional. Para BID y CDES, el río y el centro histórico van de la mano. No se avanzará bien en el centro, si el Hospedaje Yaque y la zona de pobreza crítica del Cambronal siguen en el caos y el riesgo que están.
Santiago de los Caballeros es de los territorios donde la planificación estratégica urbana llegó para quedarse. En su justa dimensión, junto a Barcelona y 140 ciudades de Iberoamérica, la metrópolis cibaeña es modelo de cohesión social y capital humano a favor del progreso.
Esta ciudad como colectivo humano se ha impuesto sobre creencias empíricas, campestres y bucólicas que daban como cierto que diseñar maquetas, bosquejos y planos arquitectónicos es lo mismo que hacer planificación territorial. Planificar estratégicamente es un ejercicio de gobernabilidad, visión y recursos comunes que va más allá del trazado de líneas y planos sin fundamento, ni criterios de inversión pública.
Como el “diablo no duerme” hoy ponemos cuidado en el hecho neurálgico que ciertas momias que se pensaban sepultas en los terrenos de sus apetencias particulares, pretendan resucitar con maquetas arquitectónicas sin validez científica, ni social. Pretenden atrapar al nuevo y pujante gobierno, muy en especial en el remozamiento del centro histórico.
Si más de 350 organizaciones sociales, de gobierno y empresariales concertaron el nuevo Plan Estratégico Santiago 2030 nos preguntamos qué buscan los mercaderes de siempre, pretendiendo imponer proyectos rechiflados. Si la sociedad civil donó más de 20 millones de pesos de trabajo voluntario para crear la nueva agenda de desarrollo y los 41 regidores del municipio, la aprobaron a unanimidad (Ordenanza 3251-19), que más escarban, los piratas urbanos de siempre.
Si el Presidente y sus Ministros acorde con el artículo 137 de la Constitución de la República, dirigido por la Presidencia y la Vicepresidencia de la República y coordinado por el Ministerio de la Presidencia, validaron la Agenda Santiago 2030, no hay otro camino más cierto que alinearnos en esa dirección.
El Consejo para el Desarrollo de Santiago (CDES) destaca los más de 50 logros conseguidos por todos los sectores y la Alcaldía en el centro. Incluso se ha creado desde el año 2006, por ordenanza municipal 2760-06, el Consejo del Centro Histórico como espacio de concertación.
Los avances no son pocos. Se colocaron 960 luminarias patrimoniales y se realizó el remozamiento de más de 10 parques y plazas. Se fortaleció la seguridad ciudadana con policía municipales y nacionales 24/7 con masificación de la muralística, creando más de 800 murales y la ruta de los murales combinados con el “son de Los Pepines”. Miles de turistas, embajadores y alcaldes la ha disfrutado.
Se aseguró el rescate de aceras y contenes con dispositivos especiales para discapacitados, realizándose una nueva señalización vial. Un sistema de recolección de residuos asegura limpieza y aseo; se peatonizó vías culturales, se facilitó la creación de la asociación de empresarios del centro y se inscribieron en el CDES, se aportó una casa propia para el Consejo del Centro Histórico y la Oficina de Patrimonio. Se remozó integralmente la Catedral Santiago Apóstol, bajo los preceptos artísticos y arquitectónicos del maestro Bismark Victoria, que fueron consultados por todos y por el Episcopado dominicano, entre otros.
Logros fueron citados como modelos para Centroamérica y el Caribe por el Consejo Rector de 140 ciudades del Centro Iberoamericano de Desarrollo Estratégico Urbano (CIDEU).
Sin embargo todavía persisten más de 35 debilidades que deben ser superadas en este territorio de 1.5 km2. Muy en especial en ordenamiento territorial, permisologías de uso de suelo, movilidad urbana, origen y destino de viajes, contaminación aérea por el excesivo cableado, falta de reactivación de los estacionamientos regulados y edificios patrimoniales que requieren remozamiento de fachadas y más.
Se ha diseñado la Ruta Corazón de forma participativa con el CDES y la escuela de arquitectura de la Universidad de Columbia en New York. Esta ruta que contempla espacios e inmuebles más emblemáticos, específicamente del centro histórico y metropolitano. Todo se puede alinear y se puede programar para que tenga conexión social. El calendario anual de la Arquidiócesis Metropolitana es vital, la gestión de la Catedral Santiago Apóstol fundamental y el programa del ministerio de Cultura, el Ayuntamiento y otras entidades, tiene que ser el resultado de una gestión cultural articuladora de entidades.