Desde que en marzo pasado se contabilizaran los primeros casos del nuevo coronarivus SARS-CoV-2, que provoca la enfermedad del COVID-19, la atención sanitaria ha estado concentrada en esta pandemia. No obstante, la malaria y el dengue siguen siendo afecciones de incidencia relevante en la población dominicana.
De acuerdo con los boletines epidemiológicos semanales, desde finales de diciembre de 2019 hasta el 18 de julio de este año se han registrado 668 casos de malaria y 3,409 casos de dengue. Aunque no se han reportado fallecidos por ninguna de las dos enfermedades, la malaria apunta un aumento de un 56% en relación con el mismo periodo de 2019, cuando sumó 376 afectados. En tanto el dengue disminuyó su incidencia, registrando 2,442 casos menos que en igual periodo de 2019, cuando alcanzó 5,851 casos.
Entre enero y julio de 2019 la malaria había provocado la muerte de dos personas y el dengue de 19.
En el país el principal foco de esta enfermedad, desde 2019, se localiza en el sector de Los Tres Brazos, ubicado en el municipio Santo Domingo Este, provincia Santo Domingo (al norte del río Ozama).
De acuerdo con cifras ofrecidas por la Dirección General de Epidemiología, del Ministerio de Salud Pública, de los 668 casos confirmados hasta el 18 de julio de este año, 589 se diagnosticaron en este sector, un 88%. La segunda localidad con mayor cantidad de casos es el barrio La Ciénaga, en el Distrito Nacional y en el borde del río Ozama, con 54 casos.
El pasado 10 de julio, las autoridades de Salud Pública intervinieron el sector de Los Tres Brazos con un operativo para reducir el riesgo de contagio de COVID-19 y controlar el foco de malaria.
Aunque con menos casos registrados hasta julio de este año en comparación con 2019, con 124 casos, la leptospirosis ha provocado la muerte de 19 personas. En igual periodo de 2019, esta enfermedad sumaba 200 diagnosticados y 28 fallecidos. La leptospirosis es una enfermedad zoonótica (que puede transmitirse entre animales y seres humanos), causada por una bacteria llamada leptospira. Los seres humanos generalmente adquieren la leptospirosis por contacto directo con la orina de animales infectados.
En cuanto a la cólera, no se han registrado casos en lo que va de año