A la Dirección General de Información y Defensa de los Afiliados a la Seguridad Social (Dida) le inquieta la condición en que quedarán miles de trabajadores que han perdido y perderán sus empleos por la crisis generada por el COVID-19 y, con ello, sus seguros médicos, por lo que propone a las autoridades que estas personas sean asumidas por el Régimen Subsidiado del Seguro Familiar de Salud (SFS).
Nélsida Marmolejos, directora de la entidad, dijo a Diario Libre que han estado pidiendo al Consejo Nacional de la Seguridad Social (CNSS) que extiendan la cobertura a los empleados suspendidos y despedidos que a partir de agosto quedarán desamparados, pues en ese mes concluye el programa FASE y la extensión de la cobertura de salud que le ha sido facilitada.
La funcionaria indicó que incluir a esos trabajadores en el Régimen Subsidiado ante la pérdida del empleo y el cese del tiempo que los seguros otorgan, es algo que está contemplado en la Ley 87-01, que crea el Sistema de Seguridad Social.
“La ley 87-01, que permite que el trabajador que está activo en el Régimen Contributivo, que goza de un seguro familiar de salud y pierde su trabajo, el sistema debe de garantizarle que pase automáticamente al Régimen Subsidiado para que mantenga su cobertura de salud hasta tanto pueda reingresar a un trabajo estable y pueda ser contributivo nuevamente”, acotó.
Marmolejos deploró que, pese a que esa prerrogativa está en la ley, en el país no se cumpla y las personas cesantes quedan sin seguro médico.
Expresó por ello, que la Dida llama al Consejo a que tome las medidas para que habilite las formas de que, automáticamente un trabajador sale de nómina de su empleador, pase al régimen subsidiado.
“Porque hay que entender que son muchas las personas que están en tratamiento de alto costo, que se enferman y más en este estado de pandemia, que quedan desprotegidos de los servicios de salud por no estar protegidos por parte de su empleador”, expresó Marmolejos.
Asimismo agregó: “Nosotros hemos estado solicitando a la dirección del Consejo Nacional de la Seguridad Social tomar en consideración el hecho de que, por los efectos de la pandemia, miles de trabajadores se verán afectados, o sea que se quedarán cesantes”.
La directora de la Dida sugirió que, como el Seguro Nacional de Salud (Senasa) se cargaría con los nuevos afiliados, el Gobierno debería aumentar los aportes que hace al organismo para que los pueda asumir