El proyecto contempla pruebas de LA COVID-19, viajes, ajustes en los campos de juego, entre otras medidas
Las medidas para el retorno a la actividad de las Grandes Ligas es cada vez mayor. Este fin de semana se presentó un manual de 67 páginas conteniendo una serie de planteamientos con miras al inicio de los entrenamientos. Una de los planes es el procesamiento de más de 10,000 pruebas de detección de coronavirus, según un documento que se conoció este sábado en varios medios estadounidenses.
En el borrador del manual de salud y seguridad agrega la revisión de campos de juego y entornos para alentar el distanciamiento social y reglas rigurosas destinadas a prevenir la propagación de la pandemia de coronavirus.
Personas allegadas a la liga que ya conocen el manual, indican que no creen que pueda ser implantado en tan corto tiempo como para reiniciar las actividades a mediados de junio. El proyecto contempla pruebas, viajes, ajustes en los campos de juego, entre otras medidas. Se indica en el texto que peloteros y otro personal del equipo que no participe en el juego se sentarán en las gradas, separados por al menos seis pies entre sí.
Las mismas medidas de distanciamiento aplicarían durante la interpretación del himno nacional.
Los golpes de puño y abrazos estarían prohibidos, al igual que escupir, usar tabaco y masticar semillas de girasol.
Los lanzadores tendrían su propio juego de bolas para lanzar durante las sesiones de bullpen. Se desanimaría a los jugadores de bañarse en los campos de juego después de cada partido y no se les permitiría tomar taxis o usar aplicaciones para compartir viajes cuando estén como visitantes. Las Grandes Ligas dividirían a las personas en niveles de seguridad.
En el nivel 1 estarían los jugadores, personal en el campo y personal médico, y el nivel 2 otros empleados “esenciales”, incluidos los funcionarios de recepción, que reciban pruebas consistentes.
Alrededor de 100 personas comprenderían los dos niveles superiores, con otro personal que no necesariamente interactúa con ellos, como los equipos de limpieza y los jardineros en el nivel 3.
Los jugadores se someterían a pruebas de temperatura múltiples diariamente, incluso en casa antes de dirigirse al campo de juego.
MLB probaría a los individuos de nivel 1 y 2 para el coronavirus varias veces a la semana, según el documento, llamando a las pruebas “un componente crítico” del regreso del juego.
Los miembros de la familia también serían evaluados. Además, el documento dice que la liga “ofrecerá diagnósticos gratuitos y pruebas de anticuerpos/serología… para los trabajadores de la salud u otros socorristas en las ciudades de origen de los clubes como un servicio público”.
Se indica en el texto que quienes resulten positivos serán puestos en cuarentena de inmediato.
El documento no especifica qué sucedería si las personas de los niveles 1 o 2, que son las únicas a las que se les permite viajar, son diagnosticadas con coronavirus si están como visitantes. Se requeriría que los jugadores usen tapabocas en todas partes excepto en el campo. Sus actividades fuera del estadio también cambiarían, sobre todo cuando estén como visitantes.
El texto indica que las Grandes Ligas “no restringirán formalmente las actividades de las personas cubiertas cuando están fuera del trabajo”.