El intercambio comercial en la localidad dominicana de Jimaní y Mal Paso, en Haití, se ha reducido entre un 40% y 60% desde que comenzaron los acontecimientos de protesta en el vecino país, informaron comerciantes dominicanos.
El acostumbrado bullicio y movimiento de gente con cargas de diversos artículos y productos en carretillas, a la cabeza y a manos, ha disminuido al igual que el de personas de ambos países. Los guardias dominicanos se ven más tranquilos, relajados y la puerta divisoria despejada.
En la polvorienta parte migratoria es donde se concentra el mayor movimiento, sobretodo de haitianos que se disponen a abordar algunos de los autobuses, mientras los agentes de los organismos de seguridad del Estado, como el Departamento Nacional de Investigaciones (DNI), el J2, M2 y la Policía Nacional, se activan al notar la presencia de la prensa, toman fotos a los periodistas y fotógrafos, graban las placas de los vehículos y preguntan por el motivo en el lugar.
Antes, en el área fronteriza, por la puerta que custodian los militares, era común ver a decenas de haitianos sudados cargando mercancías hacia Haití en cantidades considerables, pero ya no es así, son pocos los cargamentos que se cruzan.
Muchos de los comercios mayoristas están abarrotados de productos a espera de compradores haitianos.
Raulin Montero Dotel, miembro de la Cámara de Comercio y Producción de Jimaní, expresó que la inestabilidad haitiana se refleja en las compras, aunque las personas siguen comprando algunos productos, no así con la frecuencia con que lo hacían antes de las protestas.
“Las ventas nos han bajado en un 40%, debido a que el ´gourde’ está por el suelo, se dificulta la compra de dólares porque aquí vendemos es en dólares, todo está dolarizado, es muy poco el peso que se mueve aquí…el mercado se lleva diariamente, no tiene días como en Dajabón”, afirmó.
Luis Alexander Fermín, otro comerciante, manifestó que en los últimos cuatro meses han tenido una muy baja venta.
“De julio en adelante, cuando empezaron los problemas con Haití, las ventas han disminuido un 40 y un 60%, si la comparamos con el año pasado para la fecha, quizás en esos cuatro meses ha habido uno o dos días con ventas regulares, pero que no se mantienen”, detalló.
Entiende que la causa es el problema político y social en Haití, por las situaciones que se encuentran en el camino con los delincuentes que asaltan a los comerciantes y los despojan de sus productos y aclara que la República Dominicana sigue ofreciendo los productos que acostumbra a sus pares haitianos.
“Todo se mantiene igual, los mismos productos, la misma mercancía, la misma calidad, el mismo precio, todo se mantiene igual, pero las ventas siguen bajas”, afirmó.
Lo que más demandan los haitianos
Llama la atención que uno de los productos de mayor consumo de los haitianos son los vinos dulces baratos. Además, las harinas, plásticos, como vasos, platos, cucharas, pasta de tomate, aceite, extracto de malta y otros.