Caracas. La Fuerza Armada de Venezuela rechazó ayer la activación del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), un mecanismo de ayuda militar extranjera, y pidió a los países que apoyan este pacto que midan las consecuencias que puede traer para la región.
En un comunicado leído por el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, ante la prensa, la Fuerza Armada expresó su rechazo a “la espuria e írrita activación del TIAR por parte de la Organización de Estados Americanos (OEA)”, y afirmó que se trata de una “provocación irracional mediante la cual se pretende legalizar una intervención militar”.
“Es imperativo resaltar que un desenlace de esta naturaleza tendría nefastas consecuencias en toda Suramérica, erigida en la última década como una zona de paz, convirtiéndola contrariamente en una zona de guerra”, declaró el ministro, acompañado de altos mandos militares.
Aseguró que la Fuerza Armada venezolana tiene una vocación “pacifista”, pero destacó que también tiene un “carácter antiimperialista” y una “inquebrantable decisión de cumplir el juramento sagrado de honrar y defender la soberanía” hasta “perder la vida si fuese necesario”. Antes de leer el comunicado, Padrino pidió a los países que apoyan la activación del tratado que “evalúen bien” las consecuencias.