Los 30 días hábiles que el IDAC otorgó para que se retiren las aeronaves que se encuentran en los aeropuertos Las Américas (AILA) y Joaquín Balaguer (El Higüero), para evitar declararlas en abandono e incautarlas, vence mañana.
Inicialmente, cuando se hizo la advertencia (el 14 de mayo en la tarde se informó a la prensa) y se emitió el aviso, se trataba de 14 aviones, pero en el proceso posterior al anuncio realizado por el Instituto Dominicano de Aviación Civil (IDAC), se han presentado diferentes reclamantes “con calidad para ello”, le dijo el organismo a elCaribe. Por ejemplo, la Procuraduría General de la República requirió se excluyeran dos de las 14 aeronaves, porque las mismas están en proceso judicial. Del listado originalmente hay cuatro aeronaves más que salieron. Significa que de las 14 quedan ocho. Una vez esos aparatos se incauten, pasarán a Bienes Nacionales (BN) quien decidirá qué hacer, a partir de lo que establece su ley interna.
La de ahora no sería la primera incautación de aviones por parte del Estado. El IDAC lo ha hecho antes, siempre siguiendo los plazos y protocolos establecidos legalmente y basado en los artículos 100 literal b) y 101 de la Ley 491-06 de Aviación Civil y modificada por la ley 67-13, del 25 de abril de 2013, que instruye el proceso de declaratoria de una aeronave. Cuando la institución hizo el llamado a los dueños de los aparatos estableció que fueran días hábiles (de trabajo) para mayor resguardo de los terceros.
Hecha la incautación, lo que hace el IDAC es que coordina con BN y le pasa ese inventario. En otras ocasiones en las que se han hecho apropiaciones por abandono, el IDAC había solicitado, y así fue aprobado por el presidente de la República, algunas de las aeronaves, que tienen un simbólico (por no decir histórico ) para un posible museo de la aviación nacional en el país. Esas aeronaves, que eran básicamente de la desaparecida Compañía Dominicana de Aviación, se han quedado en Las Américas. Las demás (en el proceso de incautación anterior del que se tiene referencia) pasaron a BN y esa institución procedió como corresponde. Lo que ocurrirá en esta ocasión es que una vez el IDAC dicte la resolución de declaración formalmente de abandono, es cuando entonces se coordina para que BN reciba en nombre del Estado las aeronaves en cuestión.
Cuando los aviones atraviesan una situación general, como la que han tenido los que estamos describiendo, terminan en un estado de deterioro muy grande y recuperarlas, es decir, intentar ponerlas a funcionar, resulta poco viable, económicamente.
Posiblemente no los ven con ojos de rentabilidad
Por el deterioro de los aparatos en cuestión, lo aconsejable es desguasarlos (separarlos por piezas) y venderlos como metal, indican expertos. Si finalmente se optara por intentar rescatar o poner los de mejor condición a funcionar, habría que hacer un levantamiento técnico demasiado riguroso. El hecho de que algunos de los dueños de aviones los abandonaran significa -en parte- que esos aparatos “duelen poco”, es decir, no les ven valor o rentabilidad.