De las 34 presas que tiene el país solo dos están en condiciones adecuadas de operación, razón por la cual la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) y el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI) están tomando medidas para garantizar, lo más que se pueda, el agua para consumo humano.
Las presas de Hatillo y el complejo Valdesia-Jigüey- Aguacate y el contraembalse de Las Barías son las únicas que están generando agua en condiciones adecuadas. Están prácticamente fuera de servicio los acueductos Haina-Manoguayabo, La Isabela, Isa Mana y Duey, informaron Alejandro Montás, director de la CAASD y Olgo Fernández, del INDRHI.
Montás expresó que dentro de las medidas que fueron adoptadas está la reprogramación de los días y las horas en que se ofrecerá el servicio en el Distrito Nacional con una disminución en ambos aspectos. El contenido de los nuevos horarios se detalla en la versión digital de Diario Libre.
También advirtió que se limitará a solo dos días a la semana los lavaderos de vehículos y que se perseguirá a los lavaderos clandestinos. Indicó que será drástico porque, aunque todavía el Gran Santo Domingo no está en emergencia, hay que tomar las medidas que sean necesarias para ahorrar el líquido.
Adelantó que para aplicar esas medidas la CAASD se auxiliará de la Policía Nacional, del Ministerio de Medio Ambiente y la Procuraduría General de la República. “Mientras llegan las lluvias tenemos que, responsablemente, tomar las medidas”, expresó Montás.
De su lado, el director del INDRHI, Olgo Fernández, aseguró que para consumo humanos todavía quedan dos millones de metros cúbicos.
“Ya comienza a afectar la zona productora de arroz y bananos, gracias a Dios salimos de las habichuelas en San Juan y el tomate en Azua y el área del arroz que consume mucha agua. El Gobierno ha estado apoyando a los productores de la Línea Noroeste y San José de Las Matas”. Exhortó a ser prudentes a la hora de sembrar