Una exhibición de pegada del galés Gareth Bale, con un triplete que le convierte en el segundo máximo goleador de la historia del Mundial de Clubes, clasificó al Real Madrid para la final, en la que se cita con Al Ain, tras superar con solvencia al Kashima Antlers (1-3).
Bale impulsó a un Real Madrid que recuperó su cara más efectiva de las finales, adelantándole en el marcador en el minuto 44 tras una combinación con Marcelo y sellando en dos minutos, entre el 53 y el 55, su triplete. Sacó partido de una indecisión entre el central Yamamoto y su portero Kwon para marcar a puerta vacía antes de que marcar el tercero con un zurdazo a la escuadra.
“Estoy feliz pero lo más importante hoy es la victoria ante un gran equipo y que estamos en la final. Me ha dolido un poco la pierna pero quería estar y ayudar al equipo. Es un triunfo muy importante. Sabíamos que iba a ser un partido complicado en el que teníamos que ser profesionales”, aseguró Bale tras ser elegido mejor jugador del partido.
Bale es el tercer futbolista, tras el argentino Leo Messi y el portugués Cristiano Ronaldo, que marca en tres ediciones del Mundial de Clubes, competición en la que pasa a ser segundo máximo artillero tras hacerle tres tantos al Kashima Antlers. Bale ha marcado en los tres Mundiales que ha disputado con el Real Madrid.
El Real Madrid disputará el sábado la final del Mundial de Clubes ante Al Ain, que dio la sorpresa en la otra semifinal eliminando en la tanda de penaltis a River Plate. El equipo español puede conquistar su tercera corona mundial consecutiva.