Iglesia Católica dice políticos aprovechan miseria para comprar conciencia

SANTO DOMINGO.-La Iglesia Católica de Santiago, dijo ayer que  en el país y en otras naciones del Tercer Mundo la implementación de políticas sociales no tocan las causas de la pobreza, quedándose muchas veces en paliativos que envilecen a la gente, haciendo de los ciudadanos mendigos eternos.

Sólo sirven para sostener una estructura de poder que cierra los caminos hacia la dignidad”, asegura Camino en su editorial de la fecha.

Muchos políticos aprovechan la miseria de los empobrecidos para hipotecarle su conciencia y agrego que  esa clase política se hace más ricos mientras los demás se hunden en el abandono.

Asimismo, Camino anunció que el domingo 18 de este mes la  celebraran la II Jornada Mundial de los Pobres. Esta feliz iniciativa, instituida por el Papa Francisco el 13 de Junio, del 2017, nos interpela frente a una cruda realidad que lleva a tantas personas a vivir en condiciones infrahumanas.

Y haciendo acopio de la información del Papa, dice  «estamos llamados a ir al encuentro de las diversas situaciones de sufrimiento y marginación en la que viven tantos hermanos y hermanas que habitualmente designamos con el término general de pobres».

“Mirando esta realidad, el Papa nos advierte sobre una conducta en la cual podemos caer cuando deseamos hacer algo para remediar la situación de pobreza de tantas personas que viven olvidadas en su condición social. «A menudo me temo que tantas iniciativas, aun siendo meritorias y necesarias, están dirigidas más a complacernos a nosotros mismos que a acoger el clamor del pobre.”

Dijo el periódico de la Iglesia Católica en su editorial  que  espera que  esta Jornada Mundial de los Pobres nos haga despertar de la indiferencia frente al clamor de justicia de los marginados.

Asimismo, pidió redoblemos la solidaridad ante los que padecen hambre, insalubridad y falta de un empleo digno, porque como dice el Papa Francisco «La pobreza no es algo buscado, sino que es causada por el egoísmo, la avaricia y la injusticia.