Bogotá. El presidente de Colombia, Iván Duque, emitió un decreto que prohíbe la portación de pequeñas cantidades de marihuana y cocaína, aun cuando las cortes han dicho que la posesión de tales dosis no debería ser penalizada.
El decreto permite a la policía catear a las personas y confiscarles cualquier droga que lleven consigo. Los infractores serán multados.
La venta y exportación de ambas drogas es ilegal desde hace tiempo en Colombia. Sin embargo, las leyes sobre consumo de drogas se flexibilizaron desde la década de 1990 y la Corte Constitucional autorizó la portación personal de pequeñas cantidades de marihuana y cocaína.
Duque dijo que la nueva medida protegerá a los menores de los traficantes que venden droga cerca de las escuelas. Pero los detractores aseguran que restringe las libertades personales.
“Esto abre la puerta a más abuso policial”, dijo Eduardo Vélez, portavoz del Colectivo Sí a la Dosis Personal, que propugna por la legalización de la marihuana.
“Nadie va a dejar de fumarse un cacho porque se emite un decreto”, declaró Vélez poco después de que el mandatario firmó la medida. El colectivo había protestado antes contra el nuevo código de policía con un “fumatón”, en el que decenas de personas fumaron marihuana abiertamente en un parque público. La policía disolvió la protesta rápidamente.
En una histórica sentencia emitida en 1994, la Corte Constitucional de Colombia prohibió al gobierno encarcelar a los consumidores de drogas.
En la sentencia también se dice que los ciudadanos están autorizados a portar pequeñas cantidades de drogas para su consumo personal porque el gobierno no debe entrometerse en el derecho de la gente al “libre desarrollo de la personalidad”.