SANTO DOMINGO. La presencia desde ayer de militares y policías, algunos con armas largas, en varios puntos de la ciudad se debió a medidas de prevención ante aprestos de grupos choferiles de realizar manifestaciones sorpresivas en las calles como sucedió la semana pasada.
Las cabeceras de los puentes estaban siendo custodiadas por militares de la Fuerza Aérea, La Armada y el Ejército, al igual que por agentes de la Policía Nacional y de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte (DIGESETT).
En puntos estratégicos de la ciudad también fueron colocados militares y policías, sobre todo de la DIGESETT y la policía vestidos de gris en mayor cantidad que lo usual, pero además, había antimotines, cascos azules y el grupo élite de los SWAT. No hubo manifestación de conductores ni de ningún otro sector, por lo que militares y policías se mantuvieron en sus puestos desde la mañana.
“Ellos no están requisando vehículos ni personas, su labor consiste en disuadir”, sostuvo el vocero de la Policía Nacional, Frank Félix Durán.
Aclaró que la Policía fue la que dirigió las acciones y el componente militar le brinda apoyo a la logística.
El Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT) informó que está en contacto permanente dirigentes del sector choferil para buscar soluciones a sus demandas. La entidad recordó que el aumento en el precio de los combustibles se maneja mediante la Ley de Hidrocarburos, 112-00, sin embargo, no precisó si habrá revisión de la actual tarifa. La semana pasada taxistas del Gran Santo Domingo y Santiago protestaron por el aumento en los precios de los combustibles. Además miembros de CONATRA protestaron y causaron entaponamientos en las vías.
El vocero de la Policía, coronel Frank Félix Durán, explicó que al “policiamiento” como se denomina a las operaciones que desarrollaron ayer militares y policías en lugares estratégicos del Gran Santo Domingo y en Santiago, se le asignó la tarea de disuadir y prevenir y, en caso de ser necesario, reaccionar ante las eventualidades.