SANTO DOMINGO. El pasado 20 de junio, la Junta Central Electoral (JCE) -a través de la resolución 12-2018- prohibió todas las actividades proselitistas de cara a las elecciones del año 2020. La medida concitó múltiples reacciones a favor y en contra.
Pese a la restricción, los aspirantes a la nominación presidencial de los diferentes partidos continúan movilizándose. Además de recorrer las provincias y visitar a sus correligionarios, se han establecido en un espacio escasamente regulado en materia de colocación de contenidos publicitarios: los medios digitales.
La internet ofrece ventajas considerables para persuadir audiencias y esa realidad no le es ajena a una cuota de la dirigencia política nacional. Es por eso que los precandidatos, luego de la resolución, se han amparado en la publicidad segmentada para públicos, que opera bajo el “aporte voluntario” de datos por parte del target a través de los navegadores web y las redes sociales. Con ese mecanismo, los contenidos van a manos de perfiles específicos, delimitados por sus intereses, contextos y rasgos demográficos.
Una de las más utilizadas es Google AdWords, utilizada por primera vez en el año 2000 y que a la fecha es la principal fuente de ingresos de la empresa.
En las cronologías de Instagram, Twitter y Facebook de los residentes del Gran Santo Domingo, la plaza política más importante del país, se advierte una presencia notable de publicidad electoral para perfiles de jóvenes de edades comprendidas entre 18 y 34 años de edad, particularmente desde las cuentas oficiales de los precandidatos del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Francisco Domínguez, Carlos Amarante y Reinaldo Pared.
Del partido Reformista emplean el método, en calidad de precandidatos presidenciales también, el diputado por la Circunscripción 2 del Distrito Nacional, Víctor “Ito” Bisonó, y el vicepresidente de esa organización, Ricardo Espaillat. No ocurre en la misma proporción con el excandidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Luis Abinader, ni con el expresidente Hipólito Mejía, pese a que ambos han manifestado públicamente que buscarán nuevamente la nominación por ese partido de cara a los comicios de mayo del 2020.
Otras de las ventajas que ofrece la publicidad segmentada en el ciberespacio es que, por su naturaleza, no genera pasivos sólidos, es menos costosa y es más efectiva, a juicio del publicista y docente universitario, Alfredo Capellán. “El ciberespacio le permite a los anunciantes maximizar los recursos. Es posible que el contenido llegue a un público cuantitativamente menor, pero su alcance es más efectivo”, explicó.
A juicio del experto, las agencias publicitarias locales exhiben un considerable nivel de madurez en lo que respecta al empleo de estas plataformas.
“Es cierto que cualquier usuario tiene la posibilidad de anunciarse en las redes, pero sin el respaldo profesional que se precisa para la articulación de ese mensaje es improbable comprometer al público objetivo”, sentenció.
El dispositivo de la JCE prohíbe la movilización de personas en la vía pública (caminatas y caravanas), la colocación de vallas con imágenes alusivas a figuras políticas, el uso de altoparlantes y consignas en espacios públicos; y el despliegue de propaganda en medios de comunicación tradicionales: radio, televisión y prensa escrita. El pleno de la JCE consideró que el activismo de los candidatos transgredía los tiempos electorales y justificó sus facultades sobre el particular.