Cinco alerones delanteros y seis traseros, cinco asientos, nueve volantes, cuatro suelos, cinco radiadores, seis escapes, seis cascos, catorce monos, dieciséis gorras, diez pares de guantes… Esta es la particular lista de la compra que un equipo hace para abastecer sus coches y sus pilotos en cada gran premio. Como previo de su viaje a Australia, Mercedes echa cuentas de su despensa y nos las muestra para que seamos un poco más conscientes de la cantidad de material que se mueve en el paddock de la Fórmula 1.
Y claro, solo hemos enumerado una pequeña parte de las más de 60 toneladas de equipaje que moverá la escudería de Brackley al otro lado del mundo, más de 40 por aire y 23 por mar, queda mucho más por ver de tan extenso inventario, pero hay una carga que es especialmente curiosa: 54,5 kg de pegatinas. Y es que, en un mundo en el que la imagen lo vale todo, hay que disponer de repuestos de sobra para tener siempre impoluta la decoración de los monoplazas, así como la de los boxes y el paddock,
También son destacables cantidades tales como 22 pistolas de ruedas, 40 llantas, 47 cajas de herramientas, 70 cajas grandes de equipamientos, tickets y merchandising, 200 tuercas, 500 tornillos y hasta dos kilómetros de cable para conectar todos los sistemas del paddock, el pit lane y demás. Todo esto es lo que mueve un equipo cualquiera de F1, multiplíquenlo por diez y tendrán una cifra aproximada del total del material que viaja en cada carrera con el Mundial. Solo con imaginarlo, asusta.