Era llovizna, de esa fina que cala en los huesos si pasas mucho tiempo a la intemperie, pero no duró demasiado, apenas un par de horas en las que el único coche que rodaba en el circuito de Barcelona era el McLaren. Necesitan test, kilómetros, un programa invernal tranquilo y real, diferente del de estos años, y en el equipo de Woking trabajan duro para conseguirlo. El belga era, transcurrida toda la mañana en el trazado catalán, el piloto que había logrado el mejor tiempo, es verdad que con el hiperblando por el blando de Vettel con el Ferrari que se quedó a siete décimas y media, pero es que ademas era el que más había rodado en el trazado, 88 vueltas. Ese número es inaudito en unos test de McLaren desde hace unos cuantos años en una sola mañana. Ahora por la tarde el plan inicial es que se suba Fernando Alonso al coche, al igual que Carlos Sainz con el Renault.
Tras Vandoorne y Vettel se situa Pierre Gasly con el Toro Rosso de motor Honda. El propulsor japonés está respondiendo y rueda de manera constante, aunque según hemos podido saber la unidad de potencia es la misma con la que terminaron el pasado año en McLaren. Es decir esta temporada Honda no trae un nuevo motor y eso se está notando en su fiabilidad.
En cuanto a los problemas los mayores llegaron de mano de Red Bull que apenas pudo rodar durante buena parte de la mañana y terminó con 20 vueltas a mediodía, aunque pronto Max Verstappen logró tiempos competitivos.
Veremos qué sucede en la tarde.