SAN CRISTÓBAL. El traslado al Palacio de Justicia de San Cristóbal de Julio Alberto Cabrera Jiménez (Jack el Destripador), condenado a 30 años por violar a seis mujeres, a tres de la cuales asesinó, provocó llanto e indignación entre muchos de los parientes de las víctimas.
Muchas lloraron mientras que otros trataron de golpear al hombre que calificaron “como un monstruo” y que hoy trata de obtener su libertad al haber cumplido la mitad de la pena impuesta.