La policía holandesa extraerá el ADN de más de 20.000 hombres para encontrar al asesino de un niño que murió en 1998, la mayor investigación sobre vínculos de parentesco de la historia del país
“Se abrieron las puertas de seis puntos de extracción. ¡Comenzó la colecta de ADN!”, tuiteó la policía de la provincia de Limburgo (sur).
Unos 21,500 hombres disponen de tres semanas para proporcionar su ADN de forma voluntaria, en el último intento de la policía para encontrar al autor del asesinato de hace 20 años.
Nicky Verstappen, de 11 años, desapareció la madrugada del 10 de agosto de 1998 en un campamento de verano en la reserva natural de Brunssummerheide, en el sur de Holanda. Su cuerpo se encontró un día después cerca del lugar.
Están invitados a participar hombres de 18 y 75 años originarios de Heibloem, donde vivía el niño, o de localidades vecinas de la reserva natural.
La policía explicó que no todos son sospechosos, sino que el objetivo es ver si alguno de los donantes de ADN es familiar de la persona que dejó restos sobre la ropa de Nicky Verstappen y en el lugar en el que se encontró su cuerpo.
Los análisis de ADN tomarán entre seis y 12 meses. Si se produce alguna coincidencia se realizarán búsquedas genealógicas.