SANTO DOMINGO. Los residentes de los sectores Atala y El Portal, en el Distrito Nacional, dicen que ya no saben qué hacer para evitar a jóvenes en motocicletas en horas del día y armados que asaltan a niños y adultos y en horas de la noche o en la madrugada escalan techos para penetrar a las viviendas.
Afirman que hay días que los mozalbetes logran atracar a varias personas en una misma calle y que los casos se han hecho tan frecuentes desde diciembre del pasado año que los ha obligado a cambiar de rutina y dejar, incluso, de ejercitarse por temor a ser la próxima víctima.
Eveline Plácido Almonte, residente del sector Atala dice que incluso dentro de sus casas no están seguros porque los ladrones escalan los techos para cometer sus actos delincuenciales y que, a pesar de que su vecina más próxima y ella decidieron colocar vallas encimas de las paredes que dividen las viviendas para que los mozalbetes no logren trasladarse por esa vía, recientemente su perro mordió la mano de alguien que la introdujo por la ventana a su habitación.
Plácido Almonte sostuvo que eso no es lo más grave, sino que dos niñas de su familia y un niño de tres años, a este último a quien los malhechores lo apuntaron con una pistola, ya han tenido que vivir la experiencia de un asalto.