Un claro favorito y un anuncio inminente. Así llegábamos al viernes de la semana pasada, pero lo único que dijeron en Williams es que decidirán su nuevo piloto a comienzos de 2018. Nada de comunicados. De esta forma, la situación parece haber cambiado. Sirotkin tenía la pole para sentarse en el asiento del que se bajó Massa gracias a sus resultados en el test de Abu Dhabi y a los 15 millones de euros que aportaría, pero Kubica contraatacó con una oferta de un millón por carrera durante las primeras siete y ha vuelta a llenar de dudas Grove.
¿Por quién apostar? Todos siguen de cerca el concurso por la última plaza de la parrilla, pero en especial lo hace Renault, equipo que abrió las oportunidades a ambos candidatos en primer lugar. Los franceses aportan su opinión y dejan en muy buen lugar al ruso. «Por su ritmo, lealtad, concentración y trabajo, creo que merece una oportunidad en la Fórmula 1. Es difícil saber cómo de fuerte sería contra cualquier compañero de equipo, pero debe tener una oportunidad, absolutamente», afirma contundente Cyril Abiteboul en ‘Autosport’.
Durante los dos últimos años, Sirotkin ha sido el piloto reserva de Renault y se ha dejado ver en algunos entrenamientos, y es ahí donde los jefes galos han podido comprobar lo efectivo que es: «Francamente, Sergey siempre nos ha impresionado. Cuando hizo Libres 1 fue capaz de demostrar que tenía algo de ritmo y también una gran comprensión del coche. Dada su moderada experiencia en F1, creo que es bastante sorprendente que la precisión de sus comentarios técnicos siempre fuese extremadamente útil».
Ahora bien, en esa progresión algo han tenido que ver ellos y quieren apuntarse sus méritos: «Su habilidad y su ritmo son naturales, pero en esta F1 las cosas no llegan gratis y también se debe al esfuerzo que el equipo puso en el piloto. Le dimos mucho kilometraje en el coche actual y en otros anteriores, y ahora es un piloto diferente al de hace 12 meses. Tiendo a creer que si Williams lo considera también es gracias al trabajo que hemos hecho juntos». Impulso a la candidatura de Sirotkin, mientras, Kubica se aferra al combate.