El futuro de Andy Murray es totalmente incierto. El tenista escocés, exnúmero 1 del mundo, sigue sin recuperarse de sus molestias en la cadera y, según asegura The Times, tiene muchas opciones de perderse el Abierto de Australia, el primer Grand Slam del año.
Murray ya paró a mediados de temporada pasada con la finalidad de recuperarse del todo y afrontar la nueva camapaña en plenitud de garantías físicas, pero cuando las molestias parecían que habían quedado en el olvido, el diario británico especula con que pase podría, incluso, pasar por el quirófano. En ese caso se perdería hasta seis meses de competición, aproximadamente.
El tenista escocés se encontraba estos días en Miami, su punto habitual de concentración de cara a la nueva temporada que está a punto de arrancar. Entre sus planes más inmediatos estaba reaparecer en el torneo de Brisbane, pero según esta información su presencia, así como en el primer major del año, están en serio peligro.