Los medicamentos son de altos costos utilizados en cirugías
La Segunda Sala de la Corte de Apelación de este distrito judicial, ratificó ayer la medida de coerción consistente en tres meses de prisión preventiva contra dos de tres empleadas del Hospital Regional Universitario José María Cabral y Báez por supuesta sustracción de medicamentos del área de farmacia valorados en 3 millones de pesos.
El tribunal determinó que Solángel Celeste Taveras García y Francisca Isabel Ramírez continúen en el Centro de Corrección y Rehabilitación Rafey Mujeres, cumpliendo la sanción que dispuso un juez del Tribunal de Atención Permanente de aquí recientemente.
Ambas mujeres, quienes ocupaban las funciones de encargadas de farmacia y almacén, están acusadas de sustraer insumos utilizados para cirugías. Esos medicamentos están valorados en tres millones de pesos.
Además de Taveras García y Francisca Ramírez, otra empleada del Cabral y Báez está involucrada en el caso. Se trata de Jennifer Toribio, a quien le impusieron presentación periódica como medida de coerción.
Francisco Hernández, abogado de una de las imputadas, calificó esa decisión como desproporcionada.
Aseguró que Solángel Celeste Taveras García y Francisca Isabel Ramírez no representan peligro de fuga para mantenerlas en prisión.
Asimismo, declaró que ahora esperarán el vencimiento de esa sanción para recurrir a la revisión obligatoria de la misma.