Sergio Marchionne, el gran jefe de Fiat y Ferrari, sobre su rival en 2017, Mercedes: «Hasta la mitad de la temporada no destacaban. Pero después se volvieron infalibles como en el pasado. Una pena, pero podemos ajustar cuentas en 2018″. El dirigente italiano hizo balance en la cena de Navidad de la escudería con los medios y en Italia dan cuenta de sus afirmaciones.
De sus dos pilotos habla bien, pero también atiza con elegancia. «Vettel a veces parece del sur, es cuestión de caracter. Es muy emocional, aunque es un grandísimo jugador bajo presión. Pero es un chico que se estudia mucho y creo que habrá aprendido, en 2018 no veremos más su cara meridional», dice sobre el alemán, a quien pasa la pelota: «De ahora en adelante, con un coche competitivo, la responsabilidad es suya. En cualquier caso no se ganan cuatro mundiales sin ser un campeón».
En cuanto a Raikkonen, al que renovaron a mitad de año por un curso más, una de cal y otra de arena: «A veces es un placer verle pilotar, otras veces no se le reconoce. Debemos encontrar el momento justo para verle rendir al máximo. Sería un pecado que Kimi acabara su carrera el próximo año sin demostrarlo».
El futuro Kimi, el próximo acompañante de Raikkonen, puede estar en la cantera de Maranello. Malo para Raikkonen. «El próximo Kimi será un joven, vienen grandes talentos como Leclerc, Verstappen, Giovinazzi. Veremos qué hace Charles, estoy muy contento con él». En cuanto al monoplaza de 2018, es optimista: «No tengo nintuna duda de que seremos competitivos por el título en 2018. Este año tuvimos muchos problemas en el banco de pruebas con la última evolución de la unidad de potencia. Eso ha hecho que cambiáramos nuestra estructura técnica».