Alfa Romeo y Sauber se adelantan a todos: presentaron este sábado en Milán los colores de su monoplaza de 2018, blanco y rojo, y anunció también oficialmente a su dúo de pilotos titulares: Charles Leclerc y Marcus Ericsson. De hecho fue Sergio Marchionne, cabeza del grupo FIAT, quien desveló la pareja del próximo curso, que por otra parte se esperaba después de los últimos test en Abu Dhabi. Ferrari quería convertir a Sauber en su equipo filial, su Toro Rosso, y con la importante inversión que realizará a través de Alfa, tendrá más posibilidades para encontrar un volante a los mejores pilotos de su academia.
«Siempre estuvimos convencidos de que donde se exprime el verdadero potencial de un fabricante es en la competición y la Fórmula 1 representa la máxima expresión de la tecnología. Han pasado más de 30 años desde la última presencia de Alfa en la Fórmula 1, así que esto es realmente especial para todos». «El Alfa Romeo Sauber F1 Team permitirá a los jóvenes pilotos tener un hueco en la Fórmula 1», dijo Marchionne.
A la presentación asistieron también Chase Carey, máximo responsable de Liberty para la Fórmula 1, y Jean Todt, presidente de la FIA: «Es un anuncio fantástico, tanto como presidente de la FIA como para un aficionado al automovilismo y la Fórmula 1. Como jefe de Ferrari tuve el privilegio de firmar un acuerdo con Sauber en 1997 y hoy estamos aquí para anunciar otro muy importante para la Fórmula 1. Alfa Romeo será el cuarto constructor de la F1, algo fantástico para el futuro de la Fórmula 1″.
Por tanto, se queda fuera Pascal Wehrlein, que ha mejorado los resultados de Ericsson pero no aporta los patrocinadores que sí tiene el sueco. Y tampoco sube Giovinazzi, otra perla de la cantera ferrarista a quien Leclerc, campeón de la Fórmula 2, ha dejado sin asiento. Será el tercer piloto y participará en entrenamientos libres.