El lanzador tuvo que dejar el equipo para ir a resolver unos asuntos personales en los Estado Unidos CARACAS.- Poco importaba si recién había culminado su mejor apertura de la presente campaña o si su renglón de victorias finalmente había conseguido la primera rayita. Para Henderson Álvarez, su salida del miércoles ante Bravos solo tenía una calificación: la última.
“Me voy triste”, señaló el serpentinero de los Tiburones.
Álvarez, quien regresó a las mayores esta temporada luego de más de dos años de ausencia por problemas en su hombro derecho, partirá a los Estados Unidos en los próximos días para atender algunos asuntos personales; y aunque su regreso está todo menos garantizado, el derecho se rehúsa a descartarlo por completo.“Voy a Miami a arreglar unos papeles y dependiendo de lo que me diga mi abogada podré volver o no”, indicó Álvarez. “Me voy a mantener trabajando para estar listo si llego a regresar. Le deseo la mayor suerte a los muchachos. Que sigan trabajando fuerte por esta pasión que nos une a todos y que Dios los mantenga saludables para tener una buena temporada”, agregó.
El retorno de Álvarez a la LVBP luego de tres temporadas de ausencia no fue el esperado. En sus primeras dos aperturas combinadas, incluyendo la de la jornada inaugural ante Leones, el valenciano permitió cuatro carreras en siete entradas y dos tercios; después de allí, todo empeoró para el una vez All-Star.
Álvarez fue castigado con nueve imparables y siete rayitas en cuatro innings en su tercera prueba y recibió otras cuatro anotaciones, tres limpias, en su cuarteto de episodios en la siguiente.
Para la quinta y última, cuando menos por ahora, el criollo pudo completar las cinco entradas por primera ocasión, tolerando igual número de hits y un trío de carreras.“No me había ido tan bien, pero son cosas que pasan en la pelota. A veces uno tiene que hacer ajustes y corregir ciertas cosas en las que estás fallando”, comentó Álvarez. “Corregí un poquito la mecánica, me estaba yendo mucho hacia adelante. En las primeras cuatro salidas estaba un poco acelerado, parecía que no tenía control de la bola. Son cosas que uno se da cuenta en el momento en que el coach de pitcheo te dice y uno también se percata de que la mecánica no está bien”, explicó.
No obstante, lo más importante es que Álvarez aseguró no sentir inconvenientes con su hombro recientemente recuperado, por lo que espera recibir el visto bueno para regresar en algún punto. “Voy a mantenerme informado y a apoyarlos desde allá”, dijo.
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