Con ganas de luchar y seguir progresando. Así se prepara Carlos Sainz antes de disputar el Gran Premio de Brasil 2017. El madrileño, que completará su tercera carrera con el monoplaza amarillo, confía en poder terminar en la zona de puntos y ayudar al equipo en su lucha con Williams por la quinta posición en el Mundial de equipos.
Sainz reconoce que el trazado de Interlagos siempre es un desafío para cualquier piloto y que será importante encontrar un óptimo equilibrio en el coche durante los entrenamientos libres: «Interlagos es un circuito clásico. Está lleno de desafíos, especialmente en la sección de las curvas que presenta cambios en la elevación. El tiempo a menudo presenta algunas sorpresas. Puede ser agradable y muy caluroso antes de que lleguen las tormentas. El secreto es acostumbrarse rápidamente al clima y tener un monoplaza bien equilibrado que esté adaptado a las condiciones secas y húmedas. En México fue difícil. Mi trompo a alta velocidad ralentizó mi carrera. Después de las últimas citas, creo que tenemos un coche que puede estar entre los diez primeros. Tenemos que mantener ambos en la pista y pensar en los puntos nuevamente en Brasil. Necesitamos contraatacar».
De igual modo, el piloto de Renault recuerda con gran entusiasmo la prueba del año pasado, donde la lluvia permitió luchar por las primeras posiciones: «Obviamente es un circuito bonito donde sentimos el aura de Ayrton Senna en todas partes. Él siempre está en los corazones de las personas y esto hace que esta cita sea muy especial. El año pasado tuve una buena carrera y fue uno de mis Grandes Premios más completos. Fui decimoquinto en la clasificación, a dos segundos de los mejores, ¡y de repente me encontré luchando con ellos bajo la lluvia! Pusimos en marcha una estrategia que dio sus frutos. Habíamos trabajado bien y ese domingo genial acabamos con ocho puntos».