Caroline Wozniacki ha sido una de las revelaciones del circuito WTA tras realizar un gran año 2017 al que ha puesto la guinda con su victoria en las WTA Finals, el torneo que reúne a las ocho mejores raquetas de la temporada. Con motivo de su gran temporada la WTA ha querido recopilar algunas de las cifras más destacadas del gran 2017 de Wozniacki y de su trayectoria como tenista.
Wozniacki ha jugado un total de 81 partidos en 23 torneos este 2017 con un balance de 60 victorias por 20 derrotas, con un porcentaje cercano al 75% de victorias. Es la cuarta vez que la danesa finaliza el año con más de 60 victorias tras conseguirlo en 2009, 2010 y 2011. Desde la WTA apuntan además que buena parte de sus triunfos han sido en pista dura, con un balance de 41 victorias y 13 derrotas.
El año de Wozniacki podía haber sido aún más exitoso. La danesa ha logrado esta temporada el título del torneo de Tokio y las WTA Finals para proseguir con su racha de 10 años consecutivos alzando al menos un trofeo (desde 2007 no ha terminado un año sin un título), pero se ha quedado a las puertas de ganar más torneos hasta en 6 ocasiones. En Doha, Dubai, Miami, Eastbourne, Bastad y Toronto la danesa alcanzó la final del torneo aunque no pudo llevarse el título, siendo Karolina Pliskova y Elina Svitolina sus principales verdugos (ambas ganaron dos finales ante Wozniacki).
Sin embargo, Wozniacki les ha tenido tomada la medida a las mejores raquetas del mundo, ya que ha logrado 14 victorias ante jugadoras que en el momento de enfrentarse ocupaban posición de Top-10. Además, esta temporada ha escalado en el ranking del 19º al tercer puesto (se volvió a establecer en el Top-10 tras alcanzar los cuartos de final en Roland Garros), y se encuentra a sólo 160 puntos del número 1 de Simona Halep, una posición que ya ocupó en los años 2010 y 2011 durante 67 semanas.
Wozniacki afrontará 2018 con un objetivo que aún falta en su palmarés: ganar su primer Grand Slam. La danesa acumula 27 títulos en su carrera pero aún se le resiste ganar su primer major. La danesa se quedó a las puertas de lograrlo en el US Open en 2009 y 2014 y en el próximo Abierto de Australia (15-28 enero) tendrá una nueva oportunidad de poder sumar un título de un torneo del Grand Slam a sus vitrinas.