Con una de sus mejores actuaciones de los últimos tiempos, quizá la mejor de este año, Fernando Verdasco no ha podido ganar en el ATP 250 de Estocolmo a Juan Martín del Potro, que venció por 6-7 (4), 6-4 y 7-6 (1) en dos horas y 42 minutos, y jugará este domingo la final contra Grigor Dimitrov, quien venció al italiano Fabio Fognini por 6-3 y 7-6 (2). El argentino optará así a otro título en el mismo escenario en el que sumó el último en 2016. Sería el vigésimo de su carrera. El madrileño se queda a las puertas de segunda final en 2017, tras la que disputó el pasado mes de enero en Dubai, donde cayó ante Andy Murray.
Verdasco ha estado espléndido, con una regularidad durante la mayor parte del partido que le había faltado esta temporada en otros encuentros importantes. Con velocidad y explotando los problemas de movilidad de Del Potro, que luchó hasta la extenuación y acabó agotado, Fernando se apuntó un primer set extraño en el que ambos jugadores cedieron dos veces su servicio. En el tie-break fue mejor el español, que llevó la iniciativa.
Pero el tandilense, famoso por su gran derecha y por no dar ningún partido por perdido, reaccionó y fue mejor en la segunda manga. Con un break en el segundo juego, la dominó y no permitió ni una bola de rotura de Verdasco.
Con síntomas de cansancio, Del Potro abrió con casta el tercer parcial amenazando el saque del número 43 del mundo, que aguantó la presión y tomó ventaja en el segundo juego. Se le ponía de cara el encuentro, aunque Del Potro no permitió la escapada y recuperó el break. La clave estuvo en el cuarto juego, con un 0-40 que desaprovechó Verdasco. En el octavo tuvo una ventaja para ponerse con 5-4 y saque. Tampoco la convirtió y el partido se abocó a otra muerte súbita. Ahí no hubo color. El único bajón serio del madrileño en el partido, con una doble falta para empezar, propició un 5-0 de salida del argentino que fue definitivo.