Fernando Alonso y Estados Unidos. Los aficionados americanos quieren al asturiano, agradecen el esfuerzo de Fernando en su desafío de las 500 Millas de Indianápolis que le llevó a liderar una carrera mítica en una disciplina que desconocía por completo. Y que le acercó a un mundo de automovilismo quizás desconocido para el gran público europeo, pero que engancha a muchos al otro lado del charco.
Después de su renovación con McLaren, parece que las competiciones de resistencia pueden estar en el futuro del asturiano. Hace pocos días reconocía que le gustaría preparar las 24 Horas de Le Mans mejor de lo que preparó la Indy 500 y este sábado en Austin deslizaba cuál podría ser una de las carreras de preparación para la histórica carrera gala. «Obviamente haré lo que pueda para competir en América todas las carreras que pueda. La experiencia en la Indy 500 fue una de las mejores carreras de mi vida en cuanto a sensaciones. Me gustaría vivir más carreras en América y una podría ser en enero, en las 24 Horas de Daytona. Eso estaría bien», dijo el asturiano.
Podría encontrar asiento fácilmente en el equipo United Autosport, cuyo propietario es un tal Zak Brown, el responsable ejecutivo de McLaren. Y se sentiría arropado por ese público americano que sigue sus pasos tras ver su empeño por conquistar Indianápolis. Porque volverá al óvalo, pero para eso queda más tiempo…