Y al tercer día, descanso. Roger Federer se ha dado un respiro este sábado con una victoria fácil ante Feliciano López. El suizo, que había jugador diez sets en las dos primeras rondas, ganó al español en tres casí sin despeinarse: 6-3, 6-3 y 7-5 en una hora y 46 minutos
A la vista de los problemas físicos (esa dolorida espalda) que había evidenciado el Genio de Basilea, todo el mundo esperaba que Feliciano también le hiciera partido, igual que Tiafoe y Youzhny. Pero, sin energía, opuso menos resistencia de la esperada. Una pena, porque tenía una buena oportunidad de poner fin a la tiranía de Federer en sus duelos particulares. Pero no fue así y la cuenta sube: 13-0. Un break en la primera manga, dos en la segunda y dos en la tercera fueron suficientes para Roger, que solo tuvo alguna inquietud cuando Feli le rompió el saque en esa última manga y resolvió gracias, en gran parte, al alto porcentaje de puntos ganados con su primer servicio (85%).
Tampoco puede decirse que Feliciano jugara fatal, simplemente no tuvo ese algo más que hay que tener para ganar a Federer y liberarse del complejo que genera en tantos y tantos rivales. Al helvético le espera ahora un camino dulce. En octavos, el alemán Kohlschreiber (11-0 contra él), que ganó al australiano Millman por 7-5, 6-2 y 6-4. Si avanza, ya será otro cantar: Del Potro, que ganó a Bautista o Thiem, que pudo con el francés Mannarino (7-5, 6-3 y 6-4).
En otros partidos de la jornada, el joven Rublev se impuso a Dzumhur por 6-4, 6-4, 7-5 y 6-4; y David Goffin superó a Gael Monfils por retirada del francés cuando le ganaba por 7-5 y 5-1.