SANTO DOMINGO. Kalil Michel Presbot expresó que según el marco jurídico dominicano, desde la jerarquía normativa constitucional, tratados internacionales hasta reglamentos y disposiciones particulares, todo hecho punible debe ser sancionado, mediante un debido proceso donde la presunción de inocencia debe ser destruida por la estructuración fáctica del caso a cargo del Ministerio Público, sustentado en pruebas.
Enfatizó que esto quiere decir que quien alega o imputa debe probarlo.
El especialista en urbanismo y gestión pública explicó que esta regla general del derecho debe aplicar para todos los casos, desde el feminicidio, el robo de yuca y chivos y el caso Odebrecht.
“Desde esta óptica, se podría estar de acuerdo o no, con el resultado del conocimiento de la apelación a la resolución de medidas de coerción a los hasta ahora imputados en el caso Odebrecht. Sin embargo, no podemos negar que este tribunal observó el debido proceso permitiendo con equidad a las partes argumentar y motivar los presupuestos que avalaban sus pretensiones”, agregó.
Dijo que al final este tribunal de alzada falló, con el voto disidente de tres jueces, y agregó: “…la motivación de la magistrada Miriam German nos obliga a reflexionar sistemáticamente, en muchas direcciones, ya que en un ejercicio afín a su investidura, se despoja de toda emoción presionada y resuelve que no encontró un sustento probatorio en la especie, que sustentara la medida extrema privativa de libertad contenida en el Art.226 del Código Procesal Penal de prisión preventiva, ya que un testimonio en tierra foránea lleno de imprecisiones, ausente de señalamientos puntuales y hasta con negaciones, más incoherencias respecto a los datos aportados del Ministerio Público, no constituyen pruebas suficientes para sustentar este caso”.
Michel Presbot añadió: “El voto disidente de la magistrada, sin dudas nos obliga a situarnos por encima de este y cualquier caso, mostrándonos que en procura de una sanción a los que se les imputa como culpables, debe existir un marco probatorio fuerte y sustentable, pues si no nadie será culpable”.
Indicó además: “La jueza nos muestra que los dominicanos, al margen de la espectacularidad pasajera de este caso, debemos respaldar absolutamente el respeto al debido proceso, donde el fardo probatorio tiene la última palabra, pues la sanción sin pruebas, sería el antojo de la barbarie de la venganza. Barbarie de la venganza que hoy podría caer sobre los implicados del caso Odebrecht, pero que mañana podría caer sobre aquel o sobre usted!
Michel Presbot exhortó a la población a reflexionar sobre el tema.