En Canadá los mensajes de McLaren sobre su principal aliado en la Fórmula 1, Honda, denotaron menos paciencia y más tensión entre la escudería de Woking y el fabricante de motores japonés. Las prisas se echan encima cuando no se ha conseguido puntuar aún en la tercera temporada del binomio, cuando esperaban luchar ya por los títulos. Yusuke Hasegawa, responsable de Honda en la F1, deja entrever la crisis actual: “Estamos pasando por un momento difícil, pero hacemos todo lo que podemos para rectificar esta situación”.
El japonés transmitió en Montreal que no teme por su puesto y ahora tiene una petición: “Debemos centrarnos en desarrollarnos como un equipo con McLaren y cambiar las cosas tan pronto como podamos”. Lo dice en el comunicado oficial de su equipo después de admitir, algo muy habitual esta temporada, que el próximo circuito, en Azerbaiyán, no encaja con los puntos fuertes del MCL32: “Bakú tiene una de las rectas más largas de la F1, más de 2 kilómetros, es una pista donde la potencia es importante y será un duro desafío para nosotros”.
Expectativas que también transmite Eric Boullier, director deportivo de Woking: “Será un desafío similar a Canadá. En cualquier caso, en medio de todos nuestros problemas seguimos aguantando. De hecho la determinación del equipo por seguir adelante y buscar resultados positivos es aún mayor”.