Rompecabezas. Así se podría definir la relación que Mercedes y los neumáticos Pirelli están protagonizando durante el Mundial de Fórmula 1 2017. Un contratiempo que debe ser resuelto de forma rápida si los alemanes quieren intentar recuperar el terreno perdido frente a Ferrari.
El Gran Premio de Canadá puede traer las primeras respuestas para los alemanes. Montreal es uno de los trazados donde es más importante encontrar el correcto equilibrio para hacer funcionar de manera óptima los neumáticos debido a su superficie lisa, curvas cortas y largas rectas.
«La ventana de funcionamiento de los neumáticos en nuestro monoplaza es demasiada pequeña», reconoció Toto Wolff sobre el análisis que en Brackley han hecho de las primeras seis carreras de la temporada. Porque tras un largo estudio, los ingenieros de Mercedes han deducido que la larga distancia entre ejes no es el problema principal del W08.
Y para resolver las dificultades con las gomas, los libres del Gran Premio de Canadá están siendo utilizados por los alemanes como bando de pruebas para analizar diferentes cambios en suspensiones, dirección, amortiguadores y estabilizadores.
¿Serán suficientes estos cambios para hacer el W08 una máquina invencible frente a Ferrari? El domingo, primera respuesta.