Usted que le tiene tan cerca, ¿cómo ve a Nadal en este Roland Garros?
Está bien, muy cerca su mejor nivel. En la primera semana, los resultados y, sobre todo, la manera de jugar, así lo atestiguan. Sabemos que hay que estar atentos porque faltan tres partidos para llegar a la meta. La situación es buena, pero un mal día lo puede tener cualquiera. La inspiración de un rival te puede complicar las cosas.
¿Con qué aspecto del juego de Rafa está más contento desde que es su entrenador?
Con todo. El servicio está funcionando bien, desde el fondo de la pista juega con una intensidad altísima, la derecha está fenomenal, mentalmente no está teniendo casi altibajos… En todos los sets que ha jugado hasta ahora ha estado muy centrado. Solo con Paire tuvo un pequeño bajón en el segundo set, pero era el primer día. Esa estabilidad va a ser fundamental para los próximos partidos, en los que va a ser vital mantener la concentración.
Ante Basilashvili, su pupilo no acabó contento con su efectividad con el primer servicio. ¿Le preocupa?
No hay ninguna preocupación con eso, lo que pasa es que él es muy perfeccionista y quiere que todo vaya sobre ruedas.
Hace unos días dijo usted que a Nadal a veces hay que frenarle en los entrenamientos. ¿Está desatado o qué?
Le gusta siempre tener un buen volumen de trabajo, estar mucho tiempo en la pista. Pero tiene que darse cuenta de la altura de la temporada en la que está y del momento por el que pasa en su carrera. Hay cosas que ajustar y el tiempo que pasa en la pista, para mí, es una de ellas. Está acostumbrado a un ritmo alto desde siempre y creo que llega el momento de ir dosificando, pero con una calidad de trabajo muy alta.
Si gana a Carreño, a Nadal podría tocarle jugar de nuevo o con Djokovic o con Thiem. ¿A quién prefiere?
De momento hay que ganar a Pablo, que es un jugador mucho mejor ahora y ante el que esperamos una batalla larga. Ya pensaremos en Thiem o Djokovic.
¿Cómo está siendo para usted la experiencia de entrenar a Rafa?
Muy gratificante. Entreno a Nadal, a poco más se puede aspirar. Sigo aprendiendo en el día a día con él y con todo su equipo. Antes le conocía mucho y ahora le conozco un poco mejor. Tener esa amistad previa nos ha ayudado bastante. No estoy sorprendido, porque me esperaba lo mejor de él. La experiencia hasta ahora es muy bonita.
¿Qué le parece como persona?
Que tiene una gran calidad humana.