SANTO DOMINGO. El senador por San Cristóbal, Tommy Galán, rompió su silencio 24 horas después que se confirmara su nombre dentro de la lista de los legisladores que supuestamente recibieron sobornos de Odebrecht, y aseguró que “nunca” ha recibido soborno de ninguna índole en su larga trayectoria de legislador.
“Yo, Tommy Galán, nunca, en mi ejercicio como congresista, he recibido soborno alguno por parte de la empresa Odebrecht, ni de ningún otro”, sostuvo Galán en una nota de prensa distribuida por su equipo de comunicación.
El también presidente de la Comisión de Hacienda del Senado expuso que por ser el más interesado en que se aclare la acusación, por su familia, se pone a “disposición de la justicia, sin que las condiciones especiales por la naturaleza su función sean un obstáculo”.
En los párrafos siguientes, la comunicación textualmente del legislador:
“AL PUEBLO DOMINICANO TODA LA VERDAD, SOLO LA VERDAD, NADA MAS QUE LA VERDAD
Por sus hechos los conoceréis. Así dijo Jesús para distinguir a los verdaderos de los falsos profetas, y es con esta frase bíblica que inicio esta comunicación a la nación, con el fin de fijar mi posición ante los HECHOS ocurridos en el día de ayer, en los cuales mi nombre ha sido relacionado al caso que tiene el Estado Dominicano contra los sobornos cometidos por la multinacional empresa de la construcción ODEBRECHT, popularmente conocido como el caso ODE-BRECHT, y solo a eso, a HECHOS, voy a referirme.
Yo, Tommy Galán, NUNCA, en mi ejercicio como congresista, he recibido soborno alguno por parte de la empresa ODEBRECHT, ni de ningún otro.
En cumplimiento a la ley que obliga a los funcionarios públicos a realizar una declaración jurada de sus bienes, reposa en la Cámara de Cuentas de la República Dominicana, la depositada por mi en fecha 16 de agosto del 2016, en la que cualquier persona o institución interesada, en este caso, el Ministerio Público, puede accesar a la información que detalla la naturaleza de los bienes que conforman mi patrimonio económico, así como las cuentas bancarias en las que se encuentran depositados dichos bienes.
El agravio a la moral y la honestidad al que he sido objeto, compromete gravemente la tranquilidad de mi esposa, mis hijos, de toda mi familia y de mis amigos y compañeros de la organización política a la que pertenezco, lesionando la imagen que a través de toda mi vida he construido al servicio del país, por convicción, nunca por necesidad.
Por esto, por esta vía y en este instante, declaro mi intención, de que siendo yo el más interesado en que se esclarezca la verdad, se llegue al fondo de los HECHOS mediante el proceso judicial en mi contra, poniéndome a disposición de la justicia, sin que las condiciones especiales por la naturaleza de mi cargo, sean un obstáculo, a fin de que la verdad me haga libre y que mi honor sea restablecido por el bien de mi familia, mío propio y del país”.