La tenista española Garbiñe Muguruza ha asegurado que volver a conseguir el título de Roland Garros, que conquistó el año pasado, sería «muy difícil» e incluso «chocante», pero ha afirmado que está «preparada» para defenderlo y para «jugar bien».
«No voy a decir que sólo me vale repetir lo que hice el año pasado, porque eso es muy, muy difícil de conseguir. Lo que sí quiero es intentar ganar los máximos partidos posibles. Creo que volver a hacer lo mismo sería algo bastante chocante», declaró en rueda de prensa.
Sin embargo, la hispano-venezolana entiende que, como campeona defensora, tiene «más presión» porque es la rival a batir. «Cuanto más ganes el torneo, más responsabilidad y presión llevas, es normal. Todos los torneos tienen su valor, pero un ‘Grand Slam’ es el torneo más grande que hay», explicó.
«Estoy preparada para el torneo, creo que cada partido va a ser muy difícil de jugar. No le estoy dando muchas vueltas -a ser la defensora del título-; he entrenado, lo mantengo muy simple todo. Hago lo que tengo que hacer, intento tomármelo como un torneo normal, aunque es mentira. Es un ‘Grand Slam’ y quiero jugar bien. Es un comienzo nuevo; ya tengo el trofeo, quiero volver a ganarlo», continuó.
Además, Muguruza reconoció que han cambiado muchas cosas desde su victoria en la arcilla parisina en 2016. «Este torneo me ayudó mucho el año pasado a verme en una situación diferente. He mejorado mucho en cómo afronto los partidos, en la mentalidad hasta el final del partido, que hace que llegue más tarde la frustración. Soy menos negativa, intento mejorar mi constancia. Es una parte clave de mi juego que debo mejorar si quiero arriba de verdad, no solamente en un torneo», subrayó.
Por otra parte, la de Caracas valoró su debut ante la italiana Francesca Schiavone. «Creo que jugué con ella un par de veces, la última en la Copa Federación. Fue un partido muy divertido, porque ella tiene un estilo de juego que es muy diferente. Intentaré prepararme lo máximo que pueda», manifestó.
Por último, Muguruza habló de su estado físico, que le obligó a retirarse en semifinales del torneo de Roma. «Lo del cuello se me está alargando más porque nunca me había pasado, es muy molesto. No tiene nada que ver con la molestia que tuve en Roma, porque aquí no podía mover el cuello», concluyó.