Garbiñe Muguruza, que no disputaba una semifinal desde enero en Brisbane, no pudo acabar la de Roma. Se retiró cuando perdía 1-4, a los 22 minutos, con Elina Svitolina después de solicitar asistencia médica. Había salido a la pista con un vendaje en su muslo derecho, después de lucir el viernes su mejor tenis frente a Venus Williams. Pero no fue esa la causa, sino un tirón que sufrió en el cuello calentando y que le dolía al ejecutar el saque. Es su cuarta retirada del año.
La española buscaba una final que se la resistía desde que, precisamente y hace casi un año, llegara a la de Roland Garros y la ganara. Al Grand Slam de París, que arranca el día 28, llegará con las dudas sobre su físico pero con mejores sensaciones sobre su juego y también como número cinco del mundo (arrancó 7ª en el Foro Itálico), lo que unido a la ausencia de Serena Williams le permitirá ser una de las cuatro primeras cabezas de serie y no medirse a las tres de arriba hasta semifinales.
La checa Svitolina (11º) disputará su cuarta final del año frente a Simona Halep (domingo, TDP, 13:00). La rumana, que viene de ganar en Madrid, derrotó 7-5 y 6-1 a Kiki Bertens.