Luce el sol y los asientos brillan reflejando los cristales del edificio principal del circuito de Sochi, junto al estadio que un día albergó los Juegos de Invierno. Aún pocos aficionados en esa tribuna que se espera llena para la carrera. Es apenas un simulacro lo de este viernes.
Y esa es precisamente la esperanza de Mercedes, que lo de los entrenamientos libres sea un mero intento de lo que puede pasar en la carrera. Porque de no ser así Ferrari tendría mucha ventaja en este trazado ruso. Y es que Sebastian Vettel terminó primero en los ensayos por delante de su compañero Kimi Raikkonen, a dos décimas, y con los coches de la estrella muy lejos: a seis décimas Valtteri Bottas y a siete Lewis Hamilton.
Pero es que además esa diferencia se hace aún mayor en las tandas largas con diferencias de medio segundo solo en el segundo sector donde los coches italianos marcan la diferencia. En cuanto a los españoles Fernando Alonso terminó duodécimo en un McLaren Honda que está teniendo muchos problemas en el lado de Vandoorne y Carlos Sainz decimoquinto. La igualdad en esa zona de la parrilla es tremenda con apenas medio segundo del séptimo al decimoquinto.